Mientras el régimen de Nicolás Maduro aumenta los niveles de represión violenta para aferrarse al poder en medio de acusaciones de que se robó las recientes presidenciales, más del 40% de todos los venezolanos dicen que están considerando huir del país sudamericano, según muestra una nueva encuesta. La encuestadora venezolana Meganalisis encuestó a 1,007 personas entre el 8 y el 11 de agosto.
Los resultados mostraron que el 43% de los entrevistados están considerando actualmente abandonar Venezuela. En esta ocasión, la migración masiva podría ocurrir rápidamente, sugiere la encuesta de Meganalisis, que encontró que el equivalente a unas 600,000 personas están considerando irse antes de mediados del próximo mes, y otras 930,000 lo harían entre octubre y diciembre.
Si ocurriera un éxodo tan enorme, se sumarían unos 10.4 millones a lo que ya es considerado como el mayor desplazamiento externo en el hemisferio occidental, con más de 7.7 millones de venezolanos que han abandonado su país en la última década. Un flujo migratorio de ese tamaño tendría un efecto devastador en la región, que ya se encuentra bajo presión en medio de grandes niveles de migración irregular con muchos países latinoamericanos atravesando al mismo tiempo por crisis políticas y humanitarias. Colombia, que comparte una larga frontera terrestre con Venezuela, alberga ya a casi tres millones de migrantes venezolanos.
Pero cientos de miles de venezolanos también han hecho el viaje hacia el norte, dirigiéndose a la frontera norte de México para ingresar a Estados Unidos, algo que la administración Biden ha intentado desalentar a través de varias políticas, incluidas las limitaciones al asilo para quienes cruzan ilegalmente. Un éxodo venezolano de gran escala probablemente exacerbaría las tensiones políticas dentro de Estados Unidos, donde la migración ya está en el centro de la contienda electoral entre el expresidente republicano Donald Trump y la vicepresidenta demócrata Kamala Harris.
PROBLEMAS DE CREDIBILIDAD
La encuesta de Meganalisis también mostró que el 93% de los venezolanos no cree que Maduro haya ganado las elecciones. El Consejo Nacional Electoral, entidad bajo un férreo control de régimen, anunció que Maduro ganó con casi el 52% de los votos, pero incluso los electores que apoyan al gobierno están convencidos en que el hombre fuerte venezolano perdió las elecciones, según la encuesta.
En cambio, la oposición ha logrado convencer a la gran mayoría de los venezolanos, al igual que gran parte de la comunidad internacional, que fue su candidato presidencial, el ex diplomático venzolano Edmundo González, el que realmente ganó las elecciones, venciendo a Maduro por un margen de votos de más de 2 a 1. Gran parte del poder de convencimiento de la oposición se basa en que los adversarios de Maduro han presentado los registros oficiales de la votación, conocidas como actas, de más del 80% de los centros electorales que demuestran que González sacó más del 65% de los votos.
Maduro, por su parte, ha fracasado en mostrar las actas que demuestran su victoria pese a los repetidos llamados de la comunidad internacional. Rubén Chirinos, presidente de Meganalisis, explica que los venezolanos que dicen que están considerando irse en las próximas cuatro semanas prácticamente ya han tomado la decisión de hacerlo.
“En este momento, tenemos alrededor de 100,000 personas que dicen que están planeando irse ahora mismo. Esas personas ya han tomado la decisión”, dijo Chirinos al Miami Herald en una entrevista telefónica.
“Quienes dicen que están considerando hacerlo en un par de meses pueden ser porque saben que primero tienen que trabajar en los preparativos, y quienes dicen que están considerando irse el año que viene es probablemente porque se están inclinando a hacerlo pero aún están lidiando con dudas”.
La encuesta también mostró que el 70% de los encuestados dijo estar molesto por la situación en Venezuela, aunque a veces también reconoció haber sentido impotencia (59%), indignación (59%) y ansiedad (48%), al responder una pregunta donde los participantes podían seleccionar más de una de las 10 opciones diferentes. Solo el 2.8% dijo que estaba contento.
BOMBA DE TIEMPO
Los líderes de la oposición llevan varios días advirtiendo que los líderes de la región– incluyendo los de Colombia, México, Brasil y Estados Unidos– parecen no entender que Venezuela es una bomba de tiempo que de detonar catapultaría a millones de venezolanos más fuera del país y que estos pasarían a inundar las calles de toda la región en su travesía hacia Estados Unidos.
El descontento sigue creciendo en el país, en medio de la violenta represión emprendida por el régimen que ya ha provocado la muerte de 25 personas, causado heridas de seriedad a docenas de persona más y ha llevado a más de 2,000 a prisión. La represión ha adquirido recientemente un tono más violento con el empleo por parte del régimen de grupos paramilitares armados que, según testigos, abren fuego contra los manifestantes sin justificación.
Maduro anunció en los últimos días que los arrestados pronto serán enviados a Tocorón y Tocuyito, dos de las peores cárceles del país, y ahora están detenidos sin acceso a representación legal. En un intento por aumentar su control sobre la población venezolana, Maduro también ha tomado medidas para frenar el uso de las redes sociales, prohibiendo el uso de X durante 10 días y desalentando el uso de WhatsApp, Tik Tok e Instagram, mientras que la Asamblea Nacional, controlada por el régimen, prepara nuevas leyes para combatir lo que llama la propagación del “odio” en las redes sociales.
LOS PRÓXIMOS PASOS
Mientras la oposición venezolana, encabezada por la dirigente María Corina Machado, organiza manifestaciones en todo el mundo a favor de una transición democrática, líderes regionales buscan celebrar una cumbre presidencial para tratar la crisis venezolana. Entre las distintas voces internacionales que elevan sus voces clamando por una postura más proactiva de la comunidad internacional, se encuentran varios líderes y funcionarios de Florida, quienes admiten estar muy preocupados sobre la posibilidad de una nueva oleada de migrantes venezolanos.
“Las escenas de Caracas dejan claro que los venezolanos se mantienen firmes y rechazan el robo electoral de Maduro a pesar de la violenta represión generalizada. La preocupación por los refugiados es solo una parte de la razón por la que debemos respaldarlos”, dijo la representante demócrata estadounidense Debbie Wasserman Schultz, que representa franjas de Miami-Dade y el condado de Broward, en una declaración al Miami Herald.
Enfatizó que la comunidad internacional está frente a una “oportunidad única de ejercer presión hacia una transición democrática y remediar la causa fundamental de la migración venezolana: la autocracia y la corrupción” debido a la resistencia de los venezolanos y los “incansables esfuerzos diplomáticos” de la administración Biden.
La representante republicana de Estados Unidos, María Elvira Salazar, de Miami, advirtió en un comunicado que otras naciones del hemisferio occidental experimentarían “un éxodo de venezolanos que inundarían sus países como nunca antes si Nicolás Maduro logra robar las elecciones y permanecer en el poder”.
“Millones de venezolanos se aferran a la esperanza de que la pesadilla de la brutalidad chavista finalmente esté llegando a su fin y que puedan permanecer en su país de origen. La administración Biden debe hacer todo lo posible, incluida la revisión de las licencias petroleras para que Maduro y sus ‘secuaces’ sepan que es hora de irse”, agregó, utilizando la palabra española para referirse a sus secuaces.
El senador republicano estadounidense Marco Rubio criticó a la administración Biden-Harris, calificándola de “directamente responsable de perpetuar la agonía del pueblo venezolano después de brindar una serie de concesiones al narcorégimen”.
“Cualquier individuo con sentido común ha llegado a la conclusión de que la farsa de ‘victoria electoral’ de Maduro conduciría a otra ola de migración masiva”, dijo Rubio. “El pueblo venezolano votó abrumadoramente por Edmundo González como su presidente y el dictador Maduro quiere robar otra elección más”.
La administración Biden otorgó una serie de condiciones al régimen en los últimos meses en un intento por propiciar una transición democrática, incluyendo un levantamiento parcial a las sanciones petroleras, a cambio del compromiso de Maduro a celebrar elecciones libres y justas. Tras los comicios, Estados Unidos ha dicho que fue Maduro el que perdió las elecciones, pero no ha llegado a reconocer oficialmente a González como el presidente electo de Venezuela.
En los últimos días, también ha dicho que está dispuesto a discutir cualquier propuesta que conduzca a una transición democrática en Venezuela, pero negó los informes del Wall Street Journal que decían que le había ofrecido una amnistía a Maduro, quien enfrenta cargos federales de corrupción y tráfico de drogas, si dejaba el poder.
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