La jornada de elecciones en St. Louis, Missouri, se transformó en un desafío monumental tras un evento meteorológico inesperado. Lluvias torrenciales, que marcaron récords históricos en la región, causaron inundaciones que no solo afectaron la movilización de presión, sino que cobraron la vida de un residente. Las calles, transformadas en ríos, y el cierre de caminos y servicios esenciales sumaron una barrera más para los ciudadanos que intentaban participar en las votaciones.
Las autoridades locales implementaron desvíos y ubicaciones de votación alternativas en respuesta a los graves efectos del temporal, aunque estas medidas, para algunos, no fueron suficientes. El impacto de las lluvias se sintió tanto en la infraestructura pública como en el ánimo de la comunidad, mientras rescatistas y autoridades trabajaban para mantener la seguridad en medio del desastre.
Las intensas lluvias que azotaron St. Louis el martes tuvieron consecuencias trágicas. Un residente perdió la vida luego de ser hallado dentro de su vehículo, el cual quedó atrapado en una zona inundada cerca de la intersección de la I-55 y Bayless Avenue, según confirmó FOX Weather. El hallazgo se produjo cuando el nivel del agua comenzó a descender, permitiendo que los equipos de rescate accedieran al área afectada.
Impacto en el proceso de votación
El día de las elecciones, muchos votantes de St. Louis y sus alrededores enfrentaron grandes dificultades para acceder a sus centros de votación debido a las inundaciones y los cierres de caminos. En áreas como Twin River Road, cerca de la carretera W en el Condado de Jefferson, la subida de las aguas bloqueó rutas clave, afectando el acceso al centro de votación de Brookdale Farms, ubicado en Eureka.
Las autoridades ofrecieron una alternativa en el Edificio de Administración en Hillsboro, instando a los votantes a utilizar esta ubicación si no podían llegar a su sitio de votación designado. En el Condado de St. Louis, los apagones causados por las lluvias también interrumpieron las operaciones en el centro de votación de Holy Name Community Center en Bellefontaine Neighbors, donde las votaciones debieron continuar con energía de generadores.
La Oficina del Sheriff del Condado de Jefferson y otras autoridades trabajaron rápidamente para informar al público sobre los cierres de caminos y las rutas alternativas, especialmente para que los votantes pudieran ejercer su derecho al voto. Sin embargo, algunos ciudadanos expresaron su frustración e incluso sugirieron que los desvíos y cierres buscaban suprimir votos.
Ante esta situación, la oficina del sheriff aclaró que su prioridad era la seguridad de la comunidad y que las medidas de desvío se implementaron para mantener a las personas a salvo en medio de las crecidas. “Simplemente pida a un agente una ruta alternativa si no la tenemos publicada”, declaró la oficina, en un intento por aliviar las tensiones y asegurar que la mayor cantidad posible de residentes tuviera acceso a las urnas.
Lluvias récord
La severidad de las precipitaciones, que convirtieron calles en ríos, dejó importantes daños en la infraestructura de St. Louis y sus alrededores. El Aeropuerto Internacional de St. Louis rompió múltiples récords de precipitaciones en un solo día, con 8,26 centímetros de lluvia registradas hasta el martes por la mañana.
Este volumen de agua superó el récord diario anterior de 4,11 centímetros establecido en 1956, y también estableció una nueva marca para la mayor cantidad de lluvia caída en un periodo de 24 horas en noviembre, dejando atrás el récord de 9,04 centímetros registrado en 1921. A causa de las lluvias, el Distrito Escolar de Brentwood tuvo que cancelar clases debido a las inundaciones y los cortes de energía, afectando también la vida cotidiana de la comunidad.
El fenómeno de precipitaciones registrado en St. Louis ha sido uno de los más intensos en su historia reciente. Con casi 17,78 centímetros de lluvia en 24 horas, varias áreas de la ciudad se vieron completamente inundadas. En Maplewood, Brentwood y Webster Groves, el desbordamiento de Deer Creek sumergió calles enteras y complicó el acceso en múltiples puntos de la región. Esta situación meteorológica se suma a una serie de eventos climáticos extremos que han marcado el año, y que ahora se han convertido en tema de debate en la región sobre la frecuencia y gravedad de las lluvias torrenciales.
Las autoridades de St. Louis y los equipos de emergencia se movilizaron para realizar rescates de emergencia en distintos puntos de la ciudad, donde conductores quedaron atrapados en sus vehículos. Uno de los incidentes más graves se produjo en la I-55, cerca de Bayless Avenue, donde varios automóviles quedaron atrapados bajo las aguas.
La policía del condado de St. Louis confirmó el rescate de varios ocupantes de vehículos y señaló que, además del trágico fallecimiento registrado, cinco vehículos adicionales fueron encontrados tras el descenso de las aguas, aunque sus ocupantes lograron salir ilesos. En el Condado de St. Francois, se emitieron evacuaciones voluntarias en Iron Mountain Lake por el riesgo de que un dique colapsara. La comunidad de Bismarck también reportó rescates acuáticos el lunes, evidenciando el alcance y la gravedad de las inundaciones en el estado.
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