En las 240 academias que hay en Venezuela aplican la misma fórmula desde que existen las Grandes Ligas y el resultado ha sido estrellas de la talla de Andrés Galarraga, Bob Abreu y Miguel Cabrera.
En la academia de Roberto Vahlis en la isla de Margarita apelaron a la misma ecuación y el resultado fue la firma del jardinero mirandino de 18 años Yhoswar García con los Filis de Filadelfia por 2,5 millones de dólares, el tercer bono más alto para un venezolano del período 2019-2020, detrás de José Salas ($2,8 millones) y Luis Rodríguez ($2,7 millones).
El trabajo de seleccionar a un pelotero para formar parte de una academia conlleva una logística que con el paso del tiempo se ha complicado en Venezuela.
De acuerdo a José Luis Montero, presidente de la Asociación Venezolana de Agentes de Beisbol, las escuelas de pelota cuentan con deportistas oriundos del lugar, pero también de otros estados del país por lo que la academia es lugar de trabajo y también su hogar.
En la academia Roberto Vahlis hay jugadores de Nueva Esparta, pero también de Miranda como el caso de García, Mérida, Carabobo y Aragua.
“Hay que reconocer que el tema de la movilidad es complicado actualmente y en Margarita no es fácil conseguir de un día para otro un pasaje de avión o ferry”, dijo Montero, quien es el director de la academia Future Stars Baseball con asiento en Barquisimeto, de donde han salido peloteros de la talla de César Izturis, Juan Carlos Gutiérrez, Carlos Rivero y Carlos Carrasco.
Montero explicó que el grueso de los peloteros que forman parte de una academia son menores de edad y para que viajen con terceras personas necesitan un permiso que regularmente no se expide con inmediatez.
Igualmente indicó que la mayoría de los atletas provienen de hogares humildes donde la alimentación cotidiana se ha convertido en un karma.
Para leer la nota completa, pulsa aquí
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.