El medio digital PanamPost, conocido por su particular línea editorial en la que cuestiona tanto al régimen de Nicolás Maduro como al Gobierno Legítimo de Juan Guaidó, atraviesa por una crisis interna.
Ya se había adelantado sobre una presunta crisis interna, luego de que anunciaran sorpresivamente la venta del medio de comunicación.
Roberto Schnapp, administrador visible PanamPost, emitió un comunicado a la opinión pública y aseguró que “la operación no responde a objetivos políticos ni financieros”, además acotó que la línea editorial será la misma
“Con esta adquisición, nuestro único fin es hacerlo crecer y convertirlo en una referencia informativa”, decía el texto.
Este jueves, la periodista Carola Briceño Peña, abrió la caja de Pandora, y reveló detalles sobre el cambio en la línea editorial, su salida del medio digital, el cambio en los departamentos, y por qué se le niega el pago de cuatro años de vacaciones que nunca tomó.
Briceño Peña, detalló que se abrieron grupos paralelos para el manejo de las redes sociales del medio, y la persona que coordinaba el área de opinión fue removida del cargo.
«En uno estaba un socio y en otro otra persona que entiendo también era socio. Ya los cambios en redes sociales estaban cantados, querían automatizar para ser algo como La Patilla. Bueno, esa fue la línea de un principio, pero nada de esto lo decían abierta o directamente, sólo medio asomaban lo que tenían en mente», dijo.
Informó que contrataron a un nuevo personal, «con visiones y cercanía muy distintas hasta las que en ese momento habían sido la base y directriz del medio».
La periodista venezolana aseveró que todo el equipo periodístico estaba alerta desde el momento de que se anunció la venta del medio digital, pues al principio ocultaron el nombre de la nueva directiva.
«Hay que explicar que ya todo en PanAmPost era caótico, los del viejo equipo estábamos alertas y con sospechas de todo. No entendíamos por qué esa tapadera de nombres al principio de la compra», reveló.
Resaltó que no entendía la promesa de que se iba a mantener la línea editorial, cuando se contrató a un nuevo equipo que “tenían otros enfoques y cercanías distintas a lo que había sido el ADN de la marca hasta ese momento».
La periodista aseveró que el anuncio de la compra del medio digital les sorprendió a todos, pues sucedió en medio de la pandemia por el COVID-19.
«Cuando nos anuncian la compra de Panampost fue una sorpresa para todos en un momento tan complejo como la pandemia. Se nos dijo y aseguró que nada cambiaría, que seguiría el mismo camino y con mayor fuerza, que se mantenía todo el equipo igual y que estuviéramos tranquilos», expresó.
Briceño advirtió que la directiva cambió el trato con ella luego de que le preguntara a una de las nuevas periodistas contratadas el por qué, Diosdado Cabello no la tenía bloqueada en Twitter.
«Desde que pregunté sorprendida a una nueva periodista que contrataron por qué a ella Diosdado Cabello no la había bloqueado de sus redes, pues empezó (eso es lo que yo percibí) una actitud hostil hacia mi y mi trabajo», escribió.
Briceño Peña aseguró que la hostilidad la percibió directamente de Roberto Schnapp.
La cosa no terminó allí, pues a Briceño se le encargó entrenar a la nueva periodista, y los altercados incrementaron.
«A esa persona justamente trataron de enviarla a redes para «colaborar» pero cuando hablé con esa persona no tenía ni remota idea de que se debía hacer, aunque dijo que tenía experiencia en social media”, adelantó.
Briceño afirmó que la cosa se tornó más agresiva contra ella, cuando le asignó a la nueva periodista segmentar audiencias en Facebook y el nuevo dueño le dijo que no, que se encargara ella directamente.
«Desde ese momento todo lo que empezó a ser presión por preguntar lo de Diosdado se tornó peor. Llegó el momento en que me tocó dar una respuesta FUERTE a la nueva niña contratada, quien, por cierto, a la pregunta sobre lo de Diosdado dijo algo como que ellos en una época habían respirado el mismo aire y ambos salieron vivos, ante eso el nuevo dueño del medio me insultó en lo personal al llamarme arrogante y mezquina», expresó indignada a través varios mensajes publicados en un hilo en Twitter.
«Una cosa impensable es que un dueño de un medio salga con insultos personales (muy lejos de la realidad, por cierto) por decirle a su contratada nueva que lo que quería hacer no se hacía y que me tocaba empezar con ella realmente de 0 a enseñarla, porque de verdad ella no sabía, aunque aseguraba que había trabajado en varios medios en esa área. Eso desató la furia de Roberto y de ahí me insultó y cuestionó mi trabajo. Pues con decencia respondí y no me callé ante sus cuestionamientos sobre mi trabajo y la presión que empezó cuando le comenté a esa niña lo extraño que era que Diosdado Cabello no la tuviese bloqueada (como hace normalmente con la mayoría de los periodistas críticos y no complacientes) no tenía justificación», sumó.
Tras el altercado con el nuevo propietario del medio digital y su salida del mismo, la periodista denunció que le están negando su pago de los cuatro años de vacaciones que no tomó.
«El medio además, se niega a pagar los cuatro años de vacaciones que no tomé y que estaba guardando como ahorros para el día que me correspondiera irme. Cosa que NADIE del equipo viejo, obviamente asustado, ha peleado», acotó.
Cuestionó que todo el equipo anterior del medio se mantiene callado y no alza la voz para exigir los pagos que le corresponden por el arduo trabajo que realizaron mientras estuvieron en Panampost.
«Todos callados y de eso se valen los nuevos. Ahora, yo solo estoy contando parte de lo que pasé en @Panampost_es con la nueva directiva», dijo.
Para quienes preguntan, ya no estoy en @Panampost_es. Desde que pregunté sorprendida a una nueva periodista que contrataron por qué a ella Diosdado Cabello no la había bloqueado de sus redes, pues empezó (eso es lo que yo percibí) una actitud hostil hacia mi y mi trabajo (hilo)
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
Tampoco entendíamos la promesa de mantener la misma línea editorial cuando contrataron a nueva gente que evidentemente tenían otros enfoques y cercanías distintas a lo que había sido El ADN de la marca @Panampost_es hasta ese momento
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
Desde ese momento en Cadena Capriles hubo cambios en todo, aunque decían que no, hasta que el emisario nuevo director (un viejo político de oposición metido a chavista) tuvo el descaro de pararse frente a todos en la redacción (ya unos cuantos días después) para admitir cambios
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
Cuando empezó a suceder lo de PanAm, ya habiendo vivido lo de Cadena, yo insistí en preguntsr que iba a pasar con la línea editorial. O sea, se trata de un medio de comunicación, no de una bodega en la que no importa qué pasaría con nuevas directrices. En medios eso SÍ IMPORTA
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
El antetior dueño, quien siempre se portó decente y recto, nos dejó un mensaje de despedida y hasta reconoció mi labor en redes sociales de @Panampost_es, especialmente en Twitter, cosa que le agradezco que lo dejara por escrito.
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
Seguían corriendo las versiones y una de esas era que uno de esos socios había decidido publicar un comunicado luego de que @OrlvndoA amenazara con renunciar. El comunicado salió, ya teníamos un nombre, que el equipo conoció justo al momento del comunicado, pero ahí empezaron
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
Ya los cambios en redes sociales estaban cantados, querían automatizar para ser algo como La Patilla. Bueno, esa fue la línea de un principio, pero nada de esto lo decían abierta o directamente, sólo medio asomaban lo que tenían en mente. Luego metieron gente nueva que, como dije
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
A esa persona justamente trataron de enviarla a redes para "colaborar" pero cuabdo hablé con esa persona no tenía ni remota idea de que se debía hacer, aunque dijo que tenía experiencia en social media. Me tocó empezar por explicarle sobre ADN de marca y tratar de entender sus
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
Me comentó que el propio dueño se lo había pedido. Al rato efectivamente fue así. Es decir, necesitaban alguien que respondiera a ellos directamente para colocar info en Twitter. Como se me insistió en que la integrara a redes, mientras la iba entrenando le asigné la tarea de
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
Que yo me encargara de segmentar en Facebook (cosa que me encanta, por cierto). Ahí entendí que ellos tenían como objetivo la cuenta de Twitter, la cual ya estaba en 200 mil seguidores. Desde ese momento todo lo que empezó a ser presión por preguntar lo de Diosdado se tornó peor
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
El nuevo dueño del medio me insultó en lo personal al llamarme arrogante y mezquina. Una cosa impensable que un dueño de un medio salga con insultos personales (muy lejos de la realidad, por cierto) por decirle a su contratada nueva que lo que quería hacer no se hacía y que me
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
Sus cuestionamientos sobre mi trabajo y la presión que empezó cuando le comenté a esa niña lo extraño que era que Diosdado Cabello no la tuviese bloqueada (como hace normalmente con la mayoría de los periodistas ctiticos y no complacientes) no tenia justificación.
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
El medio @Panampost_es, además, se niega a pagar los cuatro años de vacaciones que no tomé y que estaba guardando como ahorros para el día que me correspondiera irme. Cosa que NADIE del equipo viejo, obviamente asustado, ha peleado. Todos callados y de eso se valen los nuevos
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
También les dejé claro al equipo que yo no me le iba a arrastrar a ¿quiénes? compraron y que ni siquiera nos hablaron claro del cambio paulatino de línea editorial y que sería solidaria con ellos mientras eso fuese recíproco. pic.twitter.com/C5axFcNcjJ
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
3.-Hay principios y valores que defendemos. Eso nos obligan a ser valientes y frentear las cosas con dignidad. 4.-Yo no quiero que a mi luego nadie venga a recriminarme que me callé lo que estaba sucediendo
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
Se debe hacer lo correcto aunque los demás no lo hagan. Lo correcto siempre será lo correcto aunque toda la sociedad vaya por otra vía. Sé que podrán salir voces de ataques o de negación (eso me llevaría a mostrar resto de la info) pero es mejor que usen esa energía para frentear
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
Y dejar de evadir realidad. Y para que quede claro, mi solidaridad con el resto ha sido proporcional a la que, lamentablemente, demostraron. La solidaridad no son palabras, son hechos, lección básica de la vida para todos.
— Carola Briceño Peña (@CarolaBriceno) September 17, 2020
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