Los consultorios populares, fueron, en principio; uno de los programas de salud de mayor éxito del proceso revolucionario impulsado por el ex Presidente Hugo Chávez, hoy la desidia reina en ese sector.
Luis Hidalgo | La Mañana Digital
Permitía a la gente de menos recursos acceder al servicio de medicina preventiva, en algunos casos, y en otros; a lo que se conoce; como el sistema primario de salud.
“El pueblo”, por cierto, -dijo Alberto Medina-, término que ha desaparecido de la boca de los más connotados dirigentes del régimen, acudía a los consultorios populares y eran atendidos por los médicos de guardia y hasta recibían medicamentos. Pues, bien, estos en la práctica han desaparecido desde el punto de vista funcional.
En su mayoría permanecen cerrados y cuando los abren no cuentan con los medicamentos necesarios para atender a los pacientes de acuerdo a la patología que presentan.
Lo cierto, que este es uno de los programas sociales del proceso revolucionario que han desaparecido en perjuicio del pueblo; un pueblo que sufre las embestidas de los fracasos cometidos por el gobierno, precisó el informante.
Así como luce abandonado el consultorio popular “Paché Vargas”; con las paredes desteñidas por la falta de pintura, su infraestructura en mal estado y sus inmediaciones llenas de monte, lucen la mayoría de estos centros dispensadores de salud.
Los médicos y las enfermeras, cuando pueden ir, hacen lo que pueden demostrando una extraordinaria vocación de servicio y sus deseos por ser útiles a las personas deprimidas socialmente.
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