Un grupo de organizaciones defensoras de los derechos humanos pidieron a la comunidad internacional que ponga “su atención hacia Nicaragua”, en el marco de la Cumbre de las Américas, que será celebrada en Los Ángeles, Estados Unidos, la próxima semana.
“En este mes de junio de 2022, cuando delegados de todos los países de las Américas se dan cita en Los Ángeles para discutir los temas de la democracia en el continente, solicitamos encarecidamente vuelvan su atención hacia Nicaragua, un país pequeño, uno de los más pobres del hemisferio y uno de los que más intensamente ha estado expulsando a su población desde 2018”, solicitó la Red de Defensa Jurídica en una carta pública.
Nicaragua, Cuba y Venezuela son los tres países cuyos presidentes, Daniel Ortega, Miguel Díaz-Canel y Nicolás Maduro, respectivamente, no han sido invitados a participar en la Cumbre de las Américas, cuyo anfitrión los considera líderes de gobierno no democráticos.
Según la Red, compuesta por cuatro organizaciones establecidas en Nicaragua, Costa Rica y los Estados Unidos, “mientras ustedes leen este mensaje cientos de nicaragüenses están abandonando Nicaragua. Más de 200 mil lo han hecho a partir de 2018. Por falta de democracia, porque el Estado viola cotidianamente los derechos humanos de la población, porque ese régimen solo puede ofrecer opresión y pobreza”.
Desde el levantamiento masivo contra Ortega en 2018, Nicaragua atraviesa una crisis que, además de los exiliados, ha dejado al menos 355 muertos, de los cuales el presidente nicaragüense ha confirmado 200, mientras que más de 180 personas permanecen encarceladas como “presos políticos”, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
De acuerdo con los defensores, las causas principales de la crisis “son la falta de libertades ciudadanas y de oportunidades que no puede ofrecer un sistema que ha destrozado cuanta institucionalidad democrática se erigió a partir de 1990, que ha herido profundamente el tejido social, que solo se afana en drenar la riqueza del país hacia pocos bolsillos y en mantenerse en el poder a cualquier costo”.
La Red de Defensa Jurídica indicó que “la mejor solución a la profunda crisis” de Nicaragua pasa por la libertad de prensa, lo que desencadenará una sucesión de libertad de expresión, democracia, justicia “y oportunidades para cada nicaragüense”.
En el marco de la crisis, los periodistas y medios de comunicación independientes sufrieron 1.520 agresiones de distintos tipos, Nicaragua fue ubicada en la “zona roja” de la organización Reporteros sin Fronteras, y hasta la presente semana, más de 350 ONG fueron canceladas por la Asamblea Nacional (Parlamento), “violando el derecho de asociación, participación, pensamiento y expresión”, resaltaron los defensores, según la Red.
La crisis de Nicaragua se acentuó en los comicios de noviembre de 2021, cuando Ortega fue reelegido para un quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto con su esposa, Rosario Murillo, como vicepresidenta, con sus principales contendientes en prisión, tras lo cual anunció el retiro del país de la Organización de los Estados Americanos (OEA).
La Red de Defensa Jurídica está compuesta por el Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más, Acción Penal, International Senior Lawyers Project y la organización Periodistas y Comunicadores Independientes de Nicaragua. EFE
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