El grupo chií libanés Hizbulá reivindicó este domingo diez ataques contra el norte de Israel, entre ellos dos andanadas de cohetes en respuesta a un bombardeo israelí que mató a cuatro civiles en el sur del Líbano, en un repunte de la violencia fronteriza por parte de ambos bandos.
EFE
La formación libanesa dijo en una serie de comunicados que seis de estos ataques fueron «en respuesta al horrible crimen cometido por el enemigo israelí en la ciudad de Meiss el Jabal», donde un bombardeo israelí mató a al menos cuatro civiles, todos ellos miembros de la misma familia, de acuerdo con la Agencia Nacional de Noticias libanesa (ANN).
La respuesta incluyó el lanzamiento de una andanada de cohetes contra la ciudad de Kiryat Shmona, contra la que fueron lanzados unos 20 proyectiles, y el disparo de otra sesentena contra posiciones de artillería y un grupo de soldados y vehículos en el norte de la Alta Galilea, según confirmó el Ejército israelí.
«Se trata de uno de los mayores bombardeos realizados desde el Líbano en medio de la guerra», afirmaron las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en un comunicado.
En su respuesta a la «masacre» de Meiss el Jabal, Hizbulá también atacó las localidades norteñas de Israel de Avivim y Shtula con «armas apropiadas» que el grupo no especificó, mientras que empleó misiles y cohetes contra los municipios de Kfar Giladi y Margaliot, en una de las jornadas más violentas en la zona fronteriza de las últimas semanas.
De acuerdo con la ANN, el ataque aéreo israelí en la localidad del sur del Líbano acabó con la vida de un padre, Fady Mohamed Jedr, una madre, Maya Amar, y sus dos hijos Mohamed y Ahmed, de 21 y 12 años, respectivamente, una acción que también fue condenada por UNICEF.
Por otra parte, Hizbulá lanzó también ataques contra equipos de vigilancia y espionaje en Ramya, Al Malkiya, Al Samaqa y Kfar Yuval, estos últimos con misiles.
Hizbulá e Israel están enzarzados en un intenso fuego cruzado desde el pasado 8 de octubre, un día después del estallido de la guerra de Gaza, choques que han causado ya decenas de muertos y han provocado el desplazamiento de decenas de miles de personas en ambos lados de la frontera común.
Estos enfrentamientos son los más graves entre Hizbulá e Israel desde el conflicto que libraron en 2006 y se han ido intensificando con el paso de los meses entre el temor a que el Líbano se pueda convertir en un segundo frente del conflicto de Gaza.