Las autoridades de Alemania ha anunciado este jueves que todas las personas que lleguen al país procedentes de zonas de riesgo deberán hacerse una prueba obligatoria de coronavirus a partir de este sábado, informan medios locales.
Quienes se nieguen a hacerse el test podrían afrontar una multa de hasta 25.000 euros, dependiendo del estado federal donde vivan. Las pruebas, que son gratuitas para los viajeros, serán realizadas por la Cruz Roja alemana en los aeropuertos, a menos que los visitantes tengan documentación en alemán o en inglés de una prueba de coronavirus negativa muy reciente.
La lista de zonas de alto riesgo, se actualiza continuamente, incluye alrededor de 130 países y regiones. En ella figuran ahora muchos países de América Latina, como México y Brasil, así como tres comunidades autónomas de España (Aragón, Navarra y Cataluña).
Con información de RT
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