El Gobierno francés ha declarado la región de París «zona de alerta máxima» y ha anunciado nuevas restricciones que entrarán en vigor el próximo martes para intentar atajar los contagios de coronavirus.
Europa Press
Las autoridades han informado de que París ha superado los umbrales máximos en los tres indicadores fijados: tasa de incidencia de la enfermedad, tasa de incidencia en mayores y tasa de ocupación de camas de cuidados intensivos por pacientes COVID.
Por tanto, a partir del martes y durante 15 días los restaurantes podrán abrir, pero con un estricto protocolo sanitario. Los bares, hasta ahora autorizados para abrir hasta las 22.00 horas, deberán cerrar por completo y las universidades y centros de educación superior deberán reducir el aforo a la mitad.
Los modelos elaborados por el Instituto Pasteur a partir de los datos recabados hasta el 25 de septiembre señalan que las camas de cuidados intensivos estarán al 60 por ciento de ocupación a mediados de noviembre, es decir, en el umbral de la emergencia sanitaria, en todas las regiones excepto Centro-Valle del Loira (46%) y Gran Este (la única región que permanece «verde,» con el 20% de las camas de cuidados intensivos ocupadas por pacientes COVID).
El último boletín de las autoridades correspondiente a este domingo informa de 12.566 nuevos casos de coronavirus contabilizados en las últimas 24 horas, mientras que los fallecidos son 32. Las cifras totales suman 619.190 positivos y 32.230 decesos.
Estos números suponen un ligero descenso en los contagios con respecto a los 16.972 del sábado, un récord desde que comenzó la pandemia, pero sin embargo implican un aumento con respecto a las 11.123 infecciones de las que se informó el pasado domingo.
El boletín recoge además 4.264 hospitalizaciones por COVID-19 en la última semana de las cuales 893 corresponden a pacientes que están en unidades de cuidados intensivos.
Además hay 1.340 brotes que están siendo investigados, lo que supone 54 más que el sábado, y 66 departamentos están en situación de vulnerabilidad elevada.
A nivel global, la epidemia ha costado la vida a 1.034.733 personas y hasta 34.999.377 se han contagiado del nuevo coronavirus, según los datos de la Universidad Johns Hopkins.