Luego de conquistar la Copa América con la selección argentina y mientras define su futuro en el Barcelona, Lionel Messi disfruta unas merecidas vacaciones en Miami junto a su familia. Allí, alquiló una casa en donde pasa las tardes junto a sus hijos y su esposa, Antonela Roccuzzo, aunque también aprovechan los días para recorrer las calles de la ciudad estadounidense. Justamente, este martes la pareja aprovechó para ir a una farmacia en donde aplican la vacuna del coronavirus.
Un grupo de paparazis pudo captar las imágenes del futbolista y su pareja en las instalaciones de la cadena Walgreens en donde muchas personas acuden diariamente para inocularse contra el covid-19. Según aclaró la agencia Grosby, en las fotografías se ve al futbolista salir de un cuarto en donde se aplican las inyecciones pero no hay precisiones sobre si fue vacunado. Una situación similar ocurrió con Roccuzzo, quien salió del lugar con una bandita roja en el hombro izquierdo que lógicamente despertó las conjeturas.
Messi, quien aún es agente libre ya que en junio venció su contrato con el Barcelona y aún no definió su futuro aunque tiene un principio de acuerdo con la entidad catalana, se apersonó al lugar luciendo unas bermudas de jean, remera clara, gorra y barbijo. Pero lo que más llamó la atención es que también portaba un mate, aunque el termo lo dejó dentro el vehículo, estacionado a metros de la farmacia.
Desde febrero de este año que en Estados Unidos las autoridades decidieron distribuir vacunas en grandes cadenas de farmacias y supermercados. Walgreens, junto con CVS, fue una de las primeras en tener permiso para administrar dosis a sus clientes, quienes deben tener cita previa, pero no necesitan contar con una prescripción médica.
En el caso de la cadena Walgreens, que tiene más de 9 mil farmacias en todo el país, la vacunación comenzó el 12 de febrero en 17 estados y territorios: Arizona, Chicago, Connecticut, Delaware, Illinois, Kentucky, Maryland, New Hampshire, Nuevo Mexico, Nueva York, Carolina del Norte, Puerto Rico, Islas Vírgenes, Vermont, Wisconsin y West Virginia. Más tarde se fue extendiendo por el resto del territorio hasta llegar a California, en donde se encuentra Messi de vacaciones.
Los contagios de coronavirus en Estados Unidos se han desplomado, lo que ha generado optimismo de que las campañas de vacunación están frenando tanto los casos severos de COVID-19 como la propagación del virus. Cerca del 59% de la población adulta ya fue inoculada y en California, en donde se encuentra la familia Messi, el porcentaje asciende al 62,5% sobre una población de 40 millones de habitantes.
La presencia del futbolista en Miami atrajo las miradas de propios y extraños desde que puso un pie en el aeropuerto tras descender su avión privado: ese día ya lo esperaba en el lugar un fanático para pedirle una firma que luego se convirtió en tatuaje. Más allá del revuelo que se armó a la salida de un restaurante donde fue a cenar con su familia, Leo decidió recluirse en compañía de los más íntimos en una lujosa casa junto al mar en Key Biscayne, en el condado Miami-Dade.
Leo, Antonela, Ciro, Thiago y Mateo viajaron rumbo a Miami, pero también se acoplaron a ellos Celia y Jorge (los padres del futbolista) junto con los hermanos del futbolista y las familias de ellos. Una merecida etapa de descanso con una gran comitiva de aquellos que estuvieron en todos los momentos de su carrera.
Tanto Leo como Roccuzzo abrieron la puerta a su intimidad durante las últimas horas con distintas fotos y videos que subieron a sus respectivos perfiles oficiales de Instagram. El misterio sobre su paradero duró poco, ya que rápidamente los fanáticos localizaron dónde estaba la mansión que eligieron para pasar sus días de descanso. La propiedad que alquiló está frente al mar con una vista a la bahía desde todas las habitaciones. Una casa equipada con la última tecnología que tiene cuatro pisos con cinco habitaciones y cinco baños, garaje para varios vehículos y una piscina “infinita”. Justamente, ellos subieron una foto con Ciro, el más chico de sus hijos.
Más allá de las actividades puertas adentro, Messi y su familia también se hicieron tiempo para salir y visitar diversos lugares, sobre todo, establecimientos gastronómicos. En una de sus primeras apariciones públicas el futbolista vivió el asedio de los fanáticos en su visita a Café Ragazzi, un exclusivo restaurante italiano que es propiedad del cantante Ricardo Montaner. Más relajado fue su paso por Prima Pasta, un café y restaurante italiano al que acudió con toda su familia completa y que es elegido habitualmente por distintas celebridades del mundo. Comió unos agnolotti de espinaca y ricota con salsa rosa, pero también probó algunos bocados de la milanesa que se había pedido uno de sus hermanos.
Las escenas de fervor se repitieron en Key Biscayne, la zona donde se alojó la familia. Allí una multitud de niños pegados a una valla aguardaron para al menos verlo pasar. Igual que sucedió a la salida del restaurant, y como también pasó en la puerta de la casa de sus suegros en Funes al regresar de Brasil con el título, la Pulga se acercó a los fans para firmarles casacas, objetos personales y prestarse para los flashes.
Por ahora, la cabeza del rosarino está puesta en disfrutar de sus vacaciones, ya que algunos días tendrá que meterse de lleno en su futuro profesional. Se prevé que, tras su descanso, Messi regrese a Barcelona para firmar la renovación de su contrato con el club blaugrana.
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