La ausencia de Serena Williams dejó al tenis femenino estadounidense sin la gran campeona y a la búsqueda de la jugadora que pudiese ocupar su puesto con la joven Coco Gauff como la mejor para hacerlo.
EFE
Pero la campeona del Abierto 2017, Sloane Stephens, tenía otros planes cuando este miércoles avanzó a la tercera ronda del último torneo de Grand Slam de la temporada al vencer a su compatriota, vigésimo primera cabeza de serie, por 6-4 y 6-2.
Con el techo cerrado en Arthur Ashe Stadium, por causa de la lluvia, Stephens salvó el único punto de quiebre al que se enfrentó para ir ininterrumpido contra la estadounidense de 17 años, moviendo su récord en la segunda ronda de Slams a un impresionante 24-3.
Este fue el primer encuentro profesional entre Stephens y Gauff. Ahora en el puesto número 66, la forma de Stephens ha estado mejorando desde el comienzo de la temporada de arcilla esta primavera.
En arcilla, el finalista del Abierto de Francia 2018 llegó a cuartos de final de Charleston, semifinales de Parma y octavos de final en Roland Garros.
Desde la temporada de arcilla, los pequeños márgenes han estancado sus resultados pero no su forma.
Sus últimas cuatro derrotas han sido muy disputadas en tres sets que llegaron hasta el final.
La suerte de Stephens cambió de inmediato en Nueva York, siempre sede de buenos recuerdos personales y deportivos.
Enfrentada contra su mejor amiga Madison Keys en la primera ronda, una revancha de la final del Abierto de 2017, Stephens superó a Keys 6-3, 1-6, 7-6 (7) en una competencia de alto nivel.
Mientras que Gauff también se encuentra en medio de la mejor temporada de su joven carrera. La adolescente ganó su primer título de arcilla en mayo y siguió con su primer cuarto de final importante en París y una ronda de octavos de final en Wimbledon.
Pero después de su éxito en las superficies naturales, Gauff llegó a Nueva York con solo cuatro partidos en las pistas duras de verano.
Poco separó a las dos tenistas en el primer set, mientras Stephens y Gauff avanzaban en sus primeros juegos de servicio, combinándose para cuatro salvados durante los primeros ocho juegos.
La historia cambió cuando llegó el noveno juego, con Gauff que cometió tres errores no forzados, incluida una doble falta en 15-40 para entregar el primer break del partido.
Con un servicio de 5-4, Stephens cerró el set superando a Gauff en un rally de 13 tiros que terminó cuando la joven estadounidense falló con un revés.
Gauff obtuvo su única oportunidad de romper el servicio de Stephens al principio del segundo set, pero el servicio de la campeona de 2017 demostró ser impenetrable en la noche. Sirviendo a 2-2, 30-40, Stephens colocó un primer servicio de más de 170 kilómetros por hora irrecuperable y lo siguió con otro amplio para ganar un punto de juego, que ella convirtió.
Con un servicio superior al 80% durante la mayor parte del partido, Stephens perdería solo 10 puntos con su servicio durante toda la noche.
En contraste, mientras Gauff poseía el servicio más potente, la estadounidense más joven luchó por proteger su segundo servicio, ganando solo el 38% de los puntos del mismo.
Tras salvar un punto de quiebre, Stephens aumentó la presión de retorno. Gauff falló en su tercera doble falta del partido para abrir el marcador a 2-3 y Stephens continuó con su fuerte y profundo golpe para empujar a Gauff muy por detrás de la línea de fondo y sin darle descanso.
La exnúmero tres del mundo aseguraría los otros tres juegos para asegurar la victoria y volver a ser protagonista en Flushing Meadows.
El siguiente duelo para Stephens, que se une a Danielle Collins como las dos estadounidenses en la tercera ronda en la parte inferior del cuadro, tendrá como próxima rival a la ganadora del partido de segunda ronda que van a disputar la campeona de 2016, la alemana Angelique Kerber contra la ucraniana Anhelina Kalinina.
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