El Ministerio de Salud de Singapur informó el sábado 3.703 nuevos casos de COVID-19, el más alto desde el comienzo de la pandemia, mientras que registró 11 nuevas muertes por la enfermedad.
Un aumento reciente en las infecciones después de la relajación de algunas restricciones ha llevado a Singapur a hacer una pausa en la reapertura. También endureció las restricciones de la semana pasada que limitaron las reuniones sociales a dos personas e hicieron que el trabajo desde casa fuera un defecto.
Más del 80% de la población de Singapur ha sido vacunada contra el virus.
Reuters
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