Dejar de comprar gas ruso como parte de las sanciones por la invasión de Ucrania tendría graves consecuencias económicas para Austria, según ha asegurado este sábado el jefe de Gobierno de este país, Karl Nehammer, que se ha reunido en Kiev con el presidente ucranio, Volodímir Zelenski, para mostrarle su solidaridad. Nehammer ha insistido en que la invasión rusa de Ucrania es «totalmente inaceptable» y que Austria, pese a su neutralidad militar (es miembro de la Unión Europea, pero no de la OTAN), no es neutral a la hora de señalar los crímenes de guerra. En una rueda de prensa conjunta con Zelenski, Nehammer ha asegurado que la UE dictará más sanciones contra Rusia para acabar con la guerra y puso como ejemplo la posibilidad de prohibir el envío de piezas técnicas usadas en los aviones militares.
Preguntado sobre la negativa de Austria a vetar la compra de gas ruso, del que es muy dependiente, el canciller austríaco ha afirmado que esa medida podría tener graves consecuencias económicas y sociales para su país. Al respecto, Zelenski aseguró que cada dólar y cada euro que llega a Rusia «se utiliza para la guerra». Austria es uno de los países, como Alemania o Hungría, reacios a dejar de comprar gas ruso. Con todo, el presidente ucranio ha agradecido el respaldo de Austria, pese a que, a diferencia de otros países de la UE, no ha enviado a Ucrania material militar. Durante la rueda de prensa, Nehammer ha adelantado que su país va a entregar a Ucrania 20 vehículos de rescate y 10 camiones de bomberos. EFE
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