El acto de beatificación del sacerdote salvadoreño Rutilio Grande, contará con un número reducido de fieles católicos por la pandemia de la covid-19 y se tomarán todas las medidas sanitarias para evitar contagios, dijo este domingo el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas.
EFE
El religioso señaló en una conferencia de prensa que la Iglesia católica planea realizar el evento en el atrio de la Catedral Metropolitana de San Salvador, con representaciones de comunidades para evitar una gran aglomeración y el mismo será trasmitido por redes sociales y canales de televisión locales.
Escobar Alas apuntó que «no pensamos en una celebración con la presencia tan grande de fieles como la que tuvimos en el 2015 con la beatificación de monseñor Romero», a cuyo acto acudieron unas 300.000 personas.
El arzobispo agregó que se cumplirán las exigencias sanitarias, como el distanciamiento, el uso de mascarilla, la toma de temperatura y la aplicación de alcohol en gel.
La iglesia católica de El Salvador anunció el viernes la beatificación del sacerdote Grande, del italiano Cosme Spessotto y dos laicos, todos asesinados por escuadrones de la muerte, para el 22 de enero de 2022.
El evento será presidido por el cardenal salvadoreño Gregorio Rosa Chávez, quien fue delegado por el papa Francisco para tal fin.
Rutilio Grande, conocido como «padre Tilo», era párroco en la localidad de Aguilares, 32 kilómetros al norte de San Salvador y mantenía una amistad con san Óscar Arnulfo Romero, también asesinado en 1980, mientras oficiaba una misa.
Romero fue consagrado arzobispo de San Salvador en febrero de 1977 y tres semanas después fue asesinado Grande, hecho que lo llevó al inicio de una larga cadena de denuncias de graves violaciones de los derechos e injusticias sociales hasta que lo mató un escuadrón de la muerte.
El padre Grande fue asesinado en un lugar conocido como Las Tres Cruces y ubicado en El Paisnal y que se ha convertido en un lugar de peregrinación para los fieles.
En la emboscada también fueron asesinados Manuel y Nelson.
A principios de 2019 durante su viaje a Panamá, el papa adelantó a un grupo de jesuitas que el proceso de beatificación procedía «muy bien».
«Yo a Rutilio lo quiero mucho. En la entrada de mi cuarto tengo un marco que contiene un pedazo de tela ensangrentada de Romero y los apuntes de una catequesis de Rutilio», reveló el papa en este encuentro.
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.