Brasil condenó este martes enérgicamente la decisión del «régimen ilegítimo» de Nicolás Maduro de vetar el ingreso a Venezuela de una delegación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que pretendía verificar las condiciones del país en medio de la actual crisis.
«El Gobierno brasileño lamenta profundamente la decisión del régimen ilegítimo de Nicolás Maduro de impedir el ingreso a Venezuela de la delegación de la DIDH que realizaría una visita prevista desde julio de 2019», según un comunicado de la Cancillería de Brasil, que reconoce a Juan Guaidó como presidente de Venezuela.
«Brasil condena el acto de manera enérgica y expresa su profunda preocupación con la situación alarmante de los derechos humanos en Venezuela», agrega el Ministerio de Relaciones Exteriores.
De acuerdo con la nota, esa situación «incluye violaciones contra todos los derechos humanos -civiles, políticos, económicos, sociales y culturales- en el contexto de la actual crisis política, económica, social y humanitaria provocada por el régimen Maduro».
Según la Cancillería brasileña, tan solo el pleno restablecimiento de la democracia y del Estado de Derecho en Venezuela permitirán que se supere la grave crisis humanitaria y de derechos humanos que enfrenta el país vecino.
«La investigación, la vigilancia y la punición de las violaciones de los derechos humanos practicados por el régimen Maduro es un paso fundamental e indispensable para esa redemocratización», afirma el comunicado.
Por lo mismo, Brasil instó a Venezuela a retomar sus compromisos con la CIDH, la comisión de la Organización de los Estados Americanos (OEA) responsable por la promoción de los derechos humanos en el continente americano.
La CIDH informó este martes que la aerolínea Copa Airlines «impidió el abordaje» de los miembros de la delegación que viajaría a Caracas «a la puerta del avión» en el aeropuerto de Panamá pese a que los delegados ya habían recibido sus pases para el vuelo.
«Informaron que recibieron instrucciones del régimen de Venezuela de que no estábamos autorizados a ingresar al país», indicó la Comisión en un mensaje en Twitter.
Para el secretario ejecutivo de la CIDH, Paulo Abrao, el veto de la entrada de la Comisión a Venezuela «representa un miedo y como que quieren esconder algo. Es propio de los regímenes autoritarios no abrirse al escrutinio de organizaciones de derechos humanos».
La agenda de la primera misión de la CIDH en Venezuela tras 18 años se estaba preparando desde julio pasado
El Gobierno chavista informó la semana pasada que «en ningún momento» ha invitado a la Comisión, por lo que la visita de la CIDH contaba solo con la autorización de Guaidó.
EFE
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