El fabricante europeo de aviones Airbus hará todo lo posible por reducir los costes sin recurrir a despidos forzosos, pero no puede garantizar que no se produzcan, dijo el martes el consejero delegado Guillaume Faury a la emisora de radio francesa RTL.
Con los viajes aéreos en una fracción de su nivel normal por las restricciones y los temores de los viajeros relacionados con la pandemia de COVID-19, las aerolíneas han retrasado las entregas de nuevos aviones.
Airbus ha dicho que necesita suprimir 15.000 puestos en todo el mundo.
“La crisis es existencial. Nuestra vida como empresa está potencialmente en riesgo si no tomamos las medidas adecuadas. Las estamos tomando”, dijo Faury.
“La situación es tan grave, y nos enfrentamos a tanta incertidumbre, que creo que nadie puede garantizar que no haya despidos forzosos si queremos adaptarnos a la situación, especialmente si evoluciona más”.
“Por otro lado, lo que digo claramente es que tenemos mucho trabajo por hacer, haremos todo lo posible para evitar llegar a ese punto”, dijo a la emisora.
“Hay muchas medidas que podemos tomar entre las bajas voluntarias y los despidos forzosos”.
En una carta enviada a la plantilla este mes, Faury advirtió que el grupo podría tener que llevar a cabo despidos forzosos después de que el transporte aéreo no se recuperara tan rápido como se esperaba de la crisis del coronavirus.
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