Estados Unidos, la Unión Europea (UE) y el Reino Unido expresaron este domingo su preocupación por la escalada del conflicto entre Israel y Hezbollah, ya que el aumento de las tensiones transfronterizas entre Jerusalén y El Líbano ha hecho temer una guerra total.
Por Infobae
“No creemos que la escalada de este conflicto militar sea lo mejor para ellos”, dijo el portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby en declaraciones a ABC, añadiendo que Estados Unidos estaba “diciéndoselo directamente a nuestros homólogos israelíes.”
“Las tensiones son mucho mayores ahora que hace tan sólo unos días”, declaró Kirby. Pero añadió que “todavía creemos que puede haber tiempo y espacio para una solución diplomática aquí y en eso estamos trabajando.”
“Hemos estado trabajando desde el comienzo de este conflicto, el 8 de octubre en adelante, para tratar de evitar una escalada, para evitar una ampliación de este conflicto en Israel y sus alrededores, pero también en la región”, agregó Kirby.
En la misma línea, la Unión Europea dijo estar “extremadamente preocupada” por una escalada del conflicto y pidió un alto el fuego “urgente”, según indicó este domingo el jefe de la política exterior de la UE, Josep Borrell.
“La Unión Europea está extremadamente preocupada por una escalada en Líbano tras los atentados del viernes en Beirut”, declaró Borrell en un comunicado, en el que pidió un “alto el fuego” a lo largo de la línea de demarcación que los separa, “así como en Gaza”.
Asimismo, el Reino Unido también pidió un “alto el fuego inmediato” tras la que calificó de “preocupante escalada”.
“Nuestro mensaje a todas las partes es claro: necesitamos un alto el fuego inmediato por ambas partes para poder llegar a un acuerdo político, para que los civiles israelíes y libaneses puedan regresar a sus hogares y vivir en paz y seguridad”, dijo el ministro británico de Asuntos Exteriores, David Lammy, en un discurso en la conferencia anual del partido laborista.
Israel y el grupo libanés Hezbollah, respaldado por Irán, han protagonizado una rápida escalada de intercambios transfronterizos, incluido un intenso lanzamiento de cohetes durante la noche contra el norte de Israel que envió a cientos de miles de personas a refugios antiaéreos, según el ejército de ese país.
Los disparos de cohetes durante la noche alcanzaron Kiryat Bialik, en las afueras de Haifa, la mayor ciudad del norte de Israel, dejando un edificio en llamas, otro agujereado por la metralla y vehículos incinerados.
Los ataques se producen tras un ataque aéreo el viernes en Beirut en el que murieron 45 personas, entre ellas comandantes de Hezbollah, y tras las mortíferas explosiones de dispositivos de comunicación en todo el Líbano a principios de semana, que causaron 39 muertos y casi 3.000 heridos.
Israel ha señalado su intención de centrarse en Hezbollah tras casi un año de fuego transfronterizo que comenzó en octubre, después de que el grupo armado palestino Hamas lanzara un ataque sin precedentes contra Israel que precipitó su guerra en Gaza.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, se comprometió a devolver a los residentes del norte de Israel desplazados por casi un año de combates cerca de sus hogares.
Una escalada bélica “desde luego no va a redundar en beneficio de todas esas personas que el primer ministro Netanyahu dice que quiere poder enviar de vuelta a casa”, afirmó Kirby.
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