Más de medio millón de personas recibieron la orden de huir de la costa del Golfo de los Estados Unidos este martes cuando la tormenta Laura se convirtió en un huracán que, según los meteorólogos, podría azotar Texas y Luisiana con vientos feroces, fuertes inundaciones y el poder de empujar el agua de mar tierra adentro.
Por Primer Informe
Se ordenó a más de 385,000 residentes que huyeran de las ciudades de Beaumont, Galveston y Port Arthur en Texas, y a otros 200,000 se les ordenó que abandonaran la parroquia de Calcasieu en el suroeste de Louisiana, donde los meteorólogos dijeron que había hasta 13 pies (4 metros) de marejada ciclónica. coronado por olas podría sumergir comunidades enteras.
Los meteorólogos esperaban el martes por la noche que la tormenta aumentara en fuerza en un 33%, de 90 mph (144 kmh) a 120 mph (193 kmh) en solo 24 horas. Proyectan que Laura golpeará la costa como un gran huracán de categoría 3. El fortalecimiento puede ralentizarse o detenerse justo antes de tocar tierra, dijeron los meteorólogos.
“Las aguas son lo suficientemente cálidas en todas partes como para soportar un gran huracán, Categoría 3 o incluso superior. Las aguas son muy cálidas donde está la tormenta ahora y lo serán durante todo el trayecto hasta la costa del Golfo ”, dijo el subdirector del Centro Nacional de Huracanes, Ed Rappaport.
El gobernador de Luisiana, John Bel Edwards, dijo que Laura se perfila para parecerse mucho al huracán Rita hace 15 años cuando devastó el suroeste de Luisiana.
«Vamos a tener inundaciones importantes en lugares que normalmente no las ven», dijo.
Se esperaba que el agua del océano llegará a tierra a lo largo de más de 450 millas (724 kilómetros) de costa desde Texas hasta Mississippi. Se emitieron advertencias de huracán desde San Luis Pass, Texas, hasta Intracoastal City, Louisiana, y advertencias de marejada ciclónica desde el sistema de protección contra inundaciones de Port Arthur, Texas, hasta la desembocadura del río Mississippi.
Las evacuaciones podrían ser aún mayores si la trayectoria de la tormenta se desvía hacia el este o el oeste, dijo Craig Fugate, exjefe de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias.
Los funcionarios instaron a las personas a quedarse con familiares o en habitaciones de hotel para evitar la propagación del virus que causa COVID-19. Los autobuses estaban equipados con equipo de protección y desinfectante, y llevarían menos pasajeros para mantener a las personas separadas, dijeron funcionarios de Texas.
La tormenta también puso en peligro un centro de la industria energética estadounidense. El gobierno dijo que el 84% de la producción de petróleo del Golfo y un 61% estimado de la producción de gas natural fueron cerrados. Se han evacuado casi 300 plataformas.
Hasta el martes por la noche, Laura estaba a 435 millas (700 kilómetros) al sureste de Lake Charles, Louisiana, viajando de oeste a noroeste a 17 mph (28 kmh). Sus vientos máximos eran de 140 kph (85 mph).
Laura pasó por Cuba después de matar a casi dos docenas de personas en la isla Hispaniola, incluidas 20 en Haití y tres en República Dominicana, donde dejó sin electricidad y provocó intensas inundaciones. Según los informes, las muertes incluyeron a una niña de 10 años cuya casa fue golpeada por un árbol y una madre y su hijo pequeño aplastados por una pared que se derrumbó.
Hasta 38 centímetros de lluvia podrían caer en algunas partes de Luisiana, dijo Donald Jones, meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional en Lake Charles, Luisiana.
En Grand Isle, Louisiana, Nicole Fantiny dijo que planeaba sobrellevar el huracán en la isla barrera junto con algunas docenas de personas más.
«Todavía podría cambiar, pero seguimos esperando y rezando para que siga yendo más al oeste como lo está haciendo», dijo Fantiny, quien administra un restaurante.
En Galveston y Port Arthur, Texas, las órdenes de evacuación obligatorias entraron en vigor poco antes del amanecer del martes. «Si decide quedarse, se quedará solo», dijo el alcalde de Port Arthur, Thurman Bartie.
Se abrieron refugios con catres separados para frenar las infecciones por coronavirus. A las personas que planeaban ingresar a los refugios se les pidió que trajeran solo una bolsa de pertenencias personales cada una y una máscara para reducir la propagación del coronavirus.
Las autoridades de Houston pidieron a los residentes que preparen suministros en caso de que se queden sin electricidad durante unos días o necesiten evacuar casas a lo largo de la costa. Algunos en el área todavía se están recuperando del huracán Harvey hace tres años.
La llegada de Laura se produce pocos días antes del aniversario del 29 de agosto del huracán Katrina, que rompió los diques en Nueva Orleans, arrasó gran parte de la costa de Mississippi y mató a 1.800 personas en 2005. Menos de un mes después, el huracán Rita azotó el suroeste de Louisiana como tormenta de categoría 3.
Con información de AP.
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