El tiempo libre que ha existido durante la cuarentena en Venezuela genera ocio, especialmente entre los adolescentes, haciendo que el consumo de bebidas alcohólicas aumente.
Con información de La Prensa de Lara
Gerardo Pastrán, coordinador general del Proyecto Juvenil Misionero (Projumi), reveló que durante los casi cuatro meses que lleva el claustro social por la pandemia de la COVID-19, hasta esta institución acuden entre cuatro y cinco familias por mes buscando orientación para un miembro adolescente.
«Como existe mucho tiempo libre, especialmente en este mes que ya las clases desde casa terminaron y se acercan las vacaciones de verano, los jóvenes están buscando una manera de pasar su tiempo, pues no pueden armar planes de salidas o visitas a casa de amigos y familia», señala.
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Pastrán, quien es educador, sustenta que una vez iniciada la cuarentena, la franja juvenil de la población se desbocó al uso de redes sociales como Instagram y TikTok, pero cuando esta alternativa no es suficiente las bebidas alcohólicas y las drogas resultan atractivas, especialmente si están rodeados por personas de su edad que hacen uso de estas sustancias con más frecuencia.
Para el abordaje de situaciones de adolescentes que constantemente incurren en el consumo de alcohol y drogas, indica Pastrán, se necesita realizar una serie de estudios con varios indicadores que, dependiendo de los resultados, se realizará asesoría física o psicológica del paciente.
Con información de La Prensa de Lara
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