La campaña de Joe Biden dice que el candidato presidencial demócrata puede derrotar al presidente Trump y ganar la Casa Blanca incluso sin tener dos campos de batalla cruciales: Florida y Pensilvania.
La directora de campaña Jen O’Malley Dillon dijo a los periodistas el martes que el exvicepresidente estaba “liderando por 8 puntos antes del día de las elecciones” en los estados clave en el campo de batalla gracias al aumento en la votación antes de las elecciones del martes.
Aproximadamente 100 millones de estadounidenses emitieron sus votos a través de la votación anticipada en persona, en ausencia y por correo, lo que representa casi las tres cuartas partes de todos los votos emitidos en las elecciones de 2016. Dillion enfatizó el «entusiasmo en la votación anticipada», que dijo «continúa hoy en la votación hasta ahora».
Dillon destacó «que nos permite seguir teniendo estos múltiples caminos hacia la victoria» a los 270 votos electorales necesarios para capturar la Casa Blanca.
Y destacó que “podemos ganar 270 votos electorales incluso sin Pensilvania y Florida. Así que creo que eso es algo que realmente ayuda a poner de relieve lo que Trump tiene que lograr hoy y lo que estamos en condiciones de hacer «.
«Trump tiene una colina más difícil de escalar hoy para superar la ventaja con la que llegamos», agregó Dillon.
Tanto Biden como el presidente han invertido tiempo y recursos tanto en Florida como en Pensilvania, dos estados que Trump ganó por estrecho margen hace cuatro años en su histórica derrota de la candidata demócrata de 2016, Hillary Clinton.
Hace cuatro años, Trump se convirtió en el primer candidato republicano en ganar Pensilvania desde George HW Bush en 1988. Trump llevó al estado – y sus 20 votos electorales – por solo siete décimas del 1%, superando las encuestas finales que favorecieron a Clinton.
Cuatro años después, la campaña de Biden concentró los esfuerzos en Pensilvania. El domingo, Biden hizo campaña en Filadelfia, Pittsburgh y otras partes del oeste de Pensilvania. El lunes, Biden hizo campaña en el oeste de Pensilvania mientras que su compañera de fórmula, la senadora Kamala Harris, se concentró en Filadelfia y la parte este del estado. Biden regresó a Pensilvania el día de las elecciones, con paradas en Scranton, donde nació, y Filadelfia.
Trump hizo campaña en el estado de Keystone el sábado y regresó a Washington el lunes. El vicepresidente Mike Pence también hizo una parada en el estado la víspera de las elecciones.
“Pasamos mucho tiempo en Pennsylvania. Siempre ha sido un lugar muy bueno para mí. Fui a la universidad allí y siempre ha sido bueno. Creo que Pennsylvania es muy importante. Florida es muy importante, obviamente ”, dijo Trump a los asistentes de campaña el martes.
Con 29 votos electorales en juego, Florida es el más grande de los campos de batalla tradicionales. Hace cuatro años, Trump superó por poco a Clinton por 1,2 puntos para cambiar el estado de azul a rojo.
Biden dijo a los periodistas el martes por la tarde que si gana Florida, «se acabó. Está hecho».
El exvicepresidente, en una parada en Wlimington, Delaware, después de hacer campaña en Pensilvania, dijo que el aumento en la votación anticipada «es un buen augurio para la base que me ha estado apoyando».
Pero advirtió que «es tan incierto. No se puede pensar en una elección en el pasado reciente donde haya tantos estados en juego».
Y mirando hacia el futuro, el exvicepresidente dijo «si hay algo de qué hablar esta noche, lo hablaré. Si no, esperaré hasta que se cuenten los votos al día siguiente».
Horas antes, el asesor general de la campaña de Biden, Bob Bauer, destacó que «en general, la votación se está desarrollando sin problemas» hasta ahora el día de las elecciones y agregó que ha visto «problemas e interrupciones mínimos».
Bauer agregó que «las tasas de rechazo de boletas están cayendo muy por debajo de lo que muchos serían hace apenas unos meses».
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