Lituania ha anunciado que se une a Letonia en la suspensión de la administración de la vacuna de AstraZeneca contra la covid-19 mientras que las autoridades de otro país báltico, Estonia, informaron de que mantienen su programa de vacunación con ese fabricante.
El ministro lituano de Sanidad, Arunas Dulkys, dijo a medios locales que la suspensión es «una medida de precaución hasta que se conozcan las conclusiones finales de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) sobre la seguridad de esa vacuna».
Gytis Andrulionis, director de la Agencia de Control de Medicamentos lituana, afirmó que la entidad decidió recomendar la suspensión temporal tras recibir tres informes sobre incidentes de trombosis, según la televisión pública del país.
«Hemos recibido tres informes sobre reacciones adversas inesperadas y graves relacionadas con casos de tromboembolias con pacientes vacunados con AstraZeneca en Lituania», dijo Andrulionis.
La suspensión afectará a parte de las 115.700 dosis de AstraZeneca recibidas en Lituania, de la cuales 77.400 ya han sido administradas, dijo a Efe un portavoz del ministerio de Sanidad.
Con 299.700 dosis recibidas y 270.400 usadas, la vacuna de Pfizer-BioNTech es la principal administrada en el país, mientras que de las 24.000 de Moderna se han usado 23.200.
Mientras tanto, las autoridades sanitarias de Estonia dijeron que se seguirá usando la vacuna de AstraZeneca a pesar de la decisión de suspenderla en los dos países bálticos vecinos y otros de la Unión Europea (UE).
Irja Lutsar, miembro del comité de expertos en inmunoprofilaxis de Estonia, declaró a la televisión local: «hemos decidido que no pararemos las vacunaciones. Por ahora, no está probado que haya relación de la vacuna con trombosis».
Según el sitio oficial de vacunación estonio vaktsineeri.ee, la vacuna de AstraZeneca será la más suministrada en el país, con dosis para aproximadamente 665.000 personas, seguida de la de Pfizer-BioNTech (325.000) y Johnson&Johnson (unas 300.000).
La suspensión de AstraZeneca en Lituania, que tiene la mayor población de las repúblicas bálticas, se conoció después de que Letonia suspendiera su administración durante al menos dos semanas en espera de la decisión de la EMA.
Las autoridades sanitarias letonas dijeron que no ha habido informaciones sobre casos de trombosis sospechosos entre personas que recibieron la vacuna de AstraZeneca.
La distribución de la vacuna de la farmacéutica anglo-sueca se ha retrasado en la UE por problemas de fabricación y en Letonia específicamente por las dificultades de la distribuidora farmacéutica la semana pasada antes de que se conocieran las dudas sobre su seguridad.
También ha habido un escándalo en relación con el rechazo del Gobierno letón a un envío de la vacuna de Pfizer-BioNTech ofrecido dentro del programa conjunto de compras de la UE y su aceptación en cambio de la vacuna de AstraZeneca, lo que causó la dimisión de la ministra de Sanidad, Ilze Vinkele. EFE
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