La compañía petrolera estatal venezolana Petróleos de Venezuela (PDVSA) planea detener la producción de crudo en tierra en una empresa conjunta, clave en la región occidental, según un documento visto por Reuters y una persona con conocimiento del asunto.
El plan para cerrar pozos en las porciones en tierra de los campos Lagunillas y Bachaquero, cerca del lago de Maracaibo, parte de la empresa conjunta Petrozamora, compartida entre PDVSA y GPB Global Resources BV, y se debe a la falta de espacio de almacenamiento disponible por el aumento de los inventarios y la caída en las exportaciones, expresa el documento.
La interrupción de la producción es la última consecuencia de una escalada en las sanciones de Estados Unidos a PDVSA, parte del esfuerzo de Washington para derrocar a Nicolás Maduro. Las exportaciones de la nación de la OPEP cayeron a un mínimo de 17 años en mayo, hasta menos de 500 mil barriles por día (bpd) debido a que las sanciones asustaron a los compradores.
La administración del presidente Donald Trump está considerando poner en la lista negra a docenas de petroleros que hicieron negocios con Venezuela, y este mes dos petroleros que habían estado navegando hacia el país sudamericano para cargar crudo se devolvieron abruptamente.
Sin petroleros dispuestos a extraer los hidrocarburos del país, los inventarios en tierra han aumentando, lo que obligó a PDVSA a reducir la producción en otros proyectos el mes pasado. Solo una plataforma estaba perforando petróleo en Venezuela en mayo, según las cifras publicadas por la firma de servicios petroleros Baker Hughes, el nivel más bajo en décadas.
Ni PDVSA ni GPB respondieron a las solicitudes de comentarios.
Petrozamora produjo más de 70 mil bpd en abril, aproximadamente el 10% de la producción total del país, según datos de PDVSA vistos por Reuters. Bachaquero y Lagunillas contribuyeron con alrededor de 24 mil bpd, y el resto de la producción provino de campos de aguas poco profundas en el lago que no se detendrán.
Petrozamora en general produjo solo 28 mil barriles el jueves, según muestra otro documento de PDVSA visto por Reuters.
Como parte de su plan para cerrar los pozos, PDVSA también planea detener la inyección de vapor en los campos en tierra, según el documento, parte de un programa lanzado en 2012 para aumentar la producción de los depósitos maduros de crudo pesado. Eso podría complicar los planes futuros para reiniciar la producción.
PDVSA asignó a GPB dos cargas de crudo para la exportación en marzo y abril, un movimiento extraño ya que la compañía ha tenido el monopolio de las exportaciones durante décadas, pero no ha recibido más cargas desde entonces, según muestran documentos internos de PDVSA.
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