Tailandia planea permitir que algunos proyectos de construcción se reanuden en su capital y las provincias circundantes, aunque la mayoría de los sitios y campamentos de trabajadores permanecerán cerrados mientras el país del sudeste asiático lidia con su mayor brote de coronavirus hasta la fecha.
El grupo de trabajo nacional COVID-19 acordó relajar las restricciones en los proyectos de construcción donde podrían causar daños o peligros, dijo el gobierno en su página de Facebook el domingo. Citó como ejemplos proyectos subterráneos, andamios y los relacionados con la seguridad del tráfico.
Los proyectos de construcción relacionados con el control de COVID-19, como los hospitales de campaña, también podrán seguir adelante.
Se permitirá el movimiento de trabajadores de la construcción para la contención de brotes, como exámenes de salud y vacunas, dijo el gobierno, y agregó que más detalles se anunciarán más adelante.
Pero los sitios de construcción y los campamentos de trabajadores en Bangkok, el epicentro del brote, y cinco provincias circundantes, estarán cerrados en su mayoría hasta fines de este mes para contener las infecciones y muertes por COVID-19.
Tailandia ha estado lidiando con su brote de coronavirus más mortal desde abril. Informó 5.916 nuevos casos de coronavirus y 44 muertes el domingo, lo que eleva el total de casos a 283.067 y 2.132 muertes.
Reuters
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