Una comisión de la Dirección de Soberanía de la Cancillería de Colombia adelanta una investigación para esclarecer el paradero de un ciudadano colombiano, quien habría sido detenido en medio de una presunta incursión del ejército venezolano, ocurrida en la tarde del viernes, en zona rural de Cúcuta.
Sin confirmar los hechos, la entidad aseguró que el sábado tuvo conocimiento de la situación por medio de un informe de la Policía, en el que se reportaba el ingreso no autorizado de los efectivos extranjeros, quienes habrían decomisado una retroexcavadora cuando desarrollaba labores de minería a orillas del río Táchira.
“La Dirección de Soberanía Territorial de la Cancillería solicitó ampliación de la información a la Policía Nacional, con el fin de identificar el lugar exacto donde ocurrieron los hechos”.
En el mismo documento, la Fuerza Pública consignaba la desaparición de Jorge Iván Cetina Sánchez, el operador de la máquina, de 24 años de edad, que posiblemente estaría en poder de ese cuerpo de seguridad venezolano.
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“La Dirección de Soberanía Territorial de la Cancillería solicitó ampliación de la información a la Policía Nacional, con el fin de identificar el lugar exacto donde ocurrieron los hechos y realizará una inspección al lugar para determinar si hubo incursión territorial”, aseguró la Cancillería de Colombia en un comunicado.
El Tiempo conoció un video grabado por un dron que muestra el momento cuando este vehículo pesado era custodiado por supuestos uniformados y conducido, a través de un paso irregular, más conocido como trocha, hacia Ureña, en Venezuela
La Alcaldía de Cúcuta también fue notificada del episodio y estableció que la máquina pertenece a la empresa Preconcretos, con sede en el anillo vial oriental de la capital nortesantandereana.
“Esto ya ha ocurrido en años anteriores y lo que dicen es que con el pago de una dádiva devuelven el vehículo”, aseguró Mauricio Franco, secretario de Seguridad Ciudadana.
El funcionario exigió una inspección inmediata del gobierno colombiano y manifestó su preocupación por casos de esta naturaleza que terminan agrediendo a la población civil.
En julio de 2017, militares venezolanos acabaron con la vida de Libardo Fuentes Hernández, un trabajador de la empresa colombiana Trituradora La Roca, que recibió varios disparos cuando se encontraba realizando labores de extracción de material de arrastre en un punto de confluencia de los ríos Táchira y Pamplonita.
Durante esta acción violenta, Géler Barreto Gutiérrez, compañero de trabajo de la víctima, fue capturado y días después entregado a las autoridades colombianas.
Por este homicidio, la justicia del vecino país ordenó la captura del sargento segundo del Ejército, Alfredo Artigas, señalado de abrir fuego contra este connacional a una distancia de menos de 10 metros.
ste es el momento cuando Venezuela habría incursionado a Colombia y se lleva a connacional que hacía trabajos con retroexcavadora. El joven está desaparecido.
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Con información de El Nacional