OCHA implementó un mecanismo para la atención de niños y niñas menores de cinco años con desnutrición aguda o deficiencia de micronutrientes, además de mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.
La Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) publicó, su última actualización sobre el panorama humanitario en el país, donde se destaca el aumento -entre febrero y abril de 2o22- de niños menores de cinco años diagnosticados con desnutrición aguda y deficiencia de micronutrientes.
Los primeros dos meses de 2022, OCHA identificó y atendió a 1.179 niños y niñas menores de cinco años con desnutrición aguda. Para abril, el número de atendido por estas razones subió a 3.200.
Además 31.000 menores de cinco años y 11.800 embarazadas y lactantes fueron suplementados con alimentos fortificados y micronutrientes.
El tamizaje (mediciones de peso y talla) hecho en todo el país demostró que la desnutrición aguda se ubicaba en 10% en algunas localidades de Barinas, Delta Amacuro y Táchira. «Esto incluye algunos casos complicados de desnutrición aguda severa que requirieron atención intrahospitalaria».
Por ello, la agencia de la ONU implementó un mecanismo para la atención de niños y niñas menores de cinco años, además de mujeres embarazadas o en periodo de lactancia. «Esta iniciativa tiene el objetivo de estandarizar los criterios de diagnóstico de la desnutrición aguda y de referencia y contrarreferencia para admisión en los programas de nutrición en el país».
OCHA también espera obtener un mapa concreto de centros de salud y comunitarios para la atención ambulatoria y hospitalarios de cuadros de desnutrición con complicaciones médicas.
Otra cuestión que destacó la agencia, respecto a la temporada de lluvias, es el posible aumento de las necesidades y riesgos nutricionales por la interrupción de la disponibilidad y acceso a agua segura, especialmente en el caso de los lactantes. Esto ya se ha identificado en Zulia y estados andinos.
«La donación no solicitada» de suplementos a la leche materna «puede, no solo socavar la práctica de la lactancia materna, sino también, exponer a lactantes y niños a cuadros diarreicos e infecciosos por el consumo de agua no tratada en el momento de su preparación», dijo la oficina en su informe.
En todo el país persiste la poca disponibilidad, acceso a insumos y equipos de atención nutricional, según OCHA, «lo que afecta a la implementación y sostenibilidad de programas de nutrición». También se mantienen las dificultades en el proceso de importación, transporte y almacenamiento de insumos de nutrición.
«Esta situación ralentiza y crea disrupciones en la continuidad de la asistencia y también afecta al sistema de referencias de casos de desnutrición a centros de salud y hospitales, ya que no todos los centros de salud priorizados cuentan con suministro permanente de insumos como RUTF y fórmulas terapéuticas F75 y F100 para la atención de casos de desnutrición aguda», destacó la agencia.
Para leer la nota completa, pulsa aquí
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.