Familiares de las mujeres detenidas en el Instituto Nacional de Orientación Femenina (Inof), ubicado en Los Teques, capital del estado Miranda, denuncian que son maltratadas en la requisa de visita para entrar a ese centro carcelario.
Las denunciantes, que prefirieron no identificarse por temor a represalias, refirieron que durante la visita del pasado fin de semana sometieron a las mujeres a revisiones exhaustivas corporales, así como a las comidas que llevaban a sus parientes. «A una de las madres de las reclusas, una señora de la tercera edad, le revisaron sus partes íntimas con una linterna y a piernas abiertas», relató una de las familiares.
El fin de semana revisaron hasta a los niños que van a las visitas. Según el testimonio, los hombres deben ir en cholas.
Restricciones con los alimentos
Los parientes aseguran que no les han dejado pasar alimentos como arepas o bollitos. «La directiva dice que va a reducir todo, porque no tiene personal para realizar las revisiones. Nosotros no tenemos culpa de esas fallas y nuestras familiares deben tener sus comidas porque las traemos», dijo otra de las denunciantes.
Los afectados explicaron que la directiva les permite entregar pan y galletas, pero durante febrero no lo permitieron. «Eso nos ayuda a rendir las comidas y no nos permitieron el ingreso», dijo Miguel García, familiar de una de las detenidas en el Inof.
Los denunciantes reclaman los «excesos» cuando van a entregar comida y productos de aseo personal, entre otros artículos. «Si llevas la comida en un pote, te la mandan a colocar en una bolsa», dijo una de las informantes.
“Para las bebidas, solo permiten refrescos y dejan a los familiares con los jugos naturales en la mano. Mucha gente no tiene plata para costear gaseosas y hace lo imposible por comprar frutas”, agregó.
En relación con la higiene personal, denunciaron que solo permiten un rollo de papel higiénico y un solo paquete de toallas sanitarias, que deben entregar abierto y lo revisan a la entrada. «Eso es antihigiénico porque ensucian la toallas y eso es de uso íntimo», señaló una de las afectadas.
Además de las prohibiciones en cuanto a la alimentación, las internas no cuentan con servicio médico. «A las mujeres embarazadas no las llevan a control prenatal y a los niños que están con sus madres no les permiten llevarlos a control pediátrico», dijo García.
Tampoco las trasladan a los tribunales cuando corresponden las audiencias, acotó.
Al mismo tiempo, las denunciantes dijeron que las presas siguen con los mismos uniformes desde el año pasado, ya que no les han entregado los nuevos.
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