La parroquia Guajira es una de las más pobladas del municipio del mismo nombre en el estado Zulia. Allí se encuentra el hospital binacional de Paraguaipoa, un centro asistencial que en los últimos año solo ha sido un espacio para atender primeros auxilios.
Sailin Fernández | Radio Fe y Alegría Noticias
A la mayoría de los pacientes que acuden a buscar atención médica se le remite a los centros médicos de Maicao, Colombia, por cualquier patología.
El personal médico y de enfermería revelaron a Radio Fe y Alegría Noticias la dramática experiencia que les ha tocado vivir durante los dos últimos años de la pandemia, donde se vieron obligados a trabajar a todo riesgo sin los trajes de bioseguridad.
Yendri Núñez, una de las trabajadoras del hospital, contó, por ejemplo, que “desconocíamos lo que llegaba a la institución porque a los servicios no nos surtían lo que realmente existía”.
“Hemos abordado pacientes muchas veces hasta sin guantes, pero no todo el tiempo podemos ingresar así sin tapabocas”, denuncia que realizó la enfermera Wendy Fernández.
Pero además este centro asistencial que por años ha estado en total abandono. Su infraestructura tiene una construcción de 1.900 metros cuadrados que se encuentra en gran parte en obra negra y en su mayoría diferente áreas no fueron culminadas y se han convertido en vertederos de los insumos usados.
Lo que tenía al principio
El hospital binacional de Paraguaipoa, que durante la gestión de Arias Cárdenas fue reinaugurado con un área de emergencia que actualmente sigue siendo la misma, el 29 de diciembre del 2016 con una inversión de 259 millones de bolívares para ese entonces.
En esta reinauguración se dejó lista una sala quirúrgica, con todo su equipamiento, la cual prestaría servicios de emergencia gineco-obstétrica, pediátrica y de adultos, sala de observación, hospitalización gineco-obstétrica, pediátrica y de adultos; sala de parto, quirófanos, sala de Rayos X y ecografía, laboratorio y consulta externa.
Con la gestión del nuevo gobernador del estado Zulia Manuel Rosales y con los nuevos responsables del sistema de salud regional se han realizado varias inspecciones por parte de la comisión de enlace y se encontró que el hospital presentaba acaparamiento de medicamentos e insumos dentro de algunos espacios abandonados.
“Hemos conseguido irregularidades, los aires estaban dañados y logramos reparar tres, algunos se encontraban desvalijados, se recuperó una unidad. De ocho módulos solo funcionan dos», así lo afirmó Junior Vieco Semprún, integrante de la comisión de enlace.
También consiguieron muchos medicamentos «de los cuales calculamos que el 30% está vencido, bultos de sondas, 47 cajas de insumos médicos, gel antibacterial, yeso, insumos de bioseguridad como mascarillas, guantes. La sala de Rayos X y la sala de quirófano no funcionan, laboratorio y ecografía por falta de insumos no prestan servicios”.
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