Para poder mantener a sus hijos en colegios privados los padres deben hacer un sacrificio, el alto costos de estas instituciones los ha hecho en algún momento desistir de seguir pagándolos, pero se resisten ante su compromiso de ofrecerles una educación de calidad a los jóvenes.
Andrea Silva, representante de dos niños que estudian en un colegio ubicado en Santa Inés en el municipio Francisco Linares Alcántara de Aragua, indicó que a principio de año tuvo una reunión en la que se acordó que la mensualidad pasaba de Bs 140.000 a más de Bs 300.000. La decisión de la mayoría la hizo pensar en la posibilidad de retirar s sus hijos del colegio, pero luego decidió dejarlos.
Explicó que luego de pasar un tiempo en el extranjero se dio cuenta que la educación venezolana sigue siendo más accesible que en otros países y prefirió dejarlos allí, a pesar de que esta decisión les afecte su bolsillo.
Bajos sueldos ahuyentan a docentes
Muchas de estas instituciones educativas también han sido afectadas por los bajos sueldos y la diáspora de docentes calificados. Cada vez son más los profesionales que deciden irse del país y buscar mejores opciones de vida.
En una institución subsidiada ubicada en La Cooperativa de Maracay, los profesores de materias como inglés, castellano y química, se fueron en busca de un mejor pago.
Ante esta situación el colegio no dio una pronta respuesta y los representantes asumieron la responsabilidad de dar una colaboración con la idea de darle un bono a los docentes para frenar un poco la pérdida de profesores especializados, pero aún así es insuficiente para ellos por la inflación que presenta el país.
Una representante explicó que desde octubre hasta noviembre la coloración era de Bs 70.000 por familia, pero esta cantidad no dio los resultados esperados y decidieron en diciembre que quien tuviera más de dos niños cancelaría Bs 50.000 por cada uno y el que tenga uno continúa pagando Bs 70.000, aparte de una cuota mensual para el mantenimiento de la institución.
Otra representante de un colegio de la Asociación Venezolana de Educación Católica (AVEC) comentó que en reunión de padres y representantes se acordó dar $2 mensual y un alimento para hacer cestas de comida para los profesores.
“Los docentes se están yendo ante los bajos sueldos. Mi hija está en octavo año y no ve Educación Física, ni Educación para la Fe, es triste conocer la realidad de los profesores”, comentó la madre que prefirió reservar su nombre.
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En búsqueda de soluciones
A veces imposibilitados de cubrir las vacantes que deja el personal educativo, sobre todo en materias claves como física, química e inglés, la comunidad educativa ha tenido que apelar a los conocimientos de los padres competitivos que sin ser pedagogos ofrecen el apoyo para solventar la situación.
La masiva renuncia de los educadores ha dejado a planteles privados y públicos con menos docentes. En busca de otros recintos donde les ofrezcan un salario más acorde y en otros casos han abandonado el país.
Diario El Periodiquito
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