El presidente de Colombia, Gustavo Petro, su ministra de Minas y Energía, Irene Vélez Torres, al igual que los funcionarios de ese despacho, evitan hablar del tema de comprarle gas natural a Petróleos de Venezuela (PDVSA) o incluso de importar el hidrocarburo a un privado; y ese es uno de los aspectos que finalmente aceleró la salida de Felipe Bayón de la presidencia de Ecopetrol, prevista para concretarse el próximo 31 de marzo.
“Hay que seguir explorando, los colombianos no podemos perder la soberanía energética, necesitamos más gas y crudo”, dijo Bayón antes de presentar los resultados financieros de Ecopetrol del año 2022, que indican un nivel récord en su historia: algo más de 33 billones de pesos (algo más de 6.900 millones de dólares)
Bayón ha insistido en que no se abandonen los procesos exploratorios y su rechazo a la compra de gas venezolano la hizo pública por primera vez en noviembre del año pasado en el marco de la V Cumbre de Petróleo, Gas y Energía que se realizó en Bogotá. “PDVSA no está en condiciones de entregarle el gas a Colombia desde el punto de vista del acondicionamiento, calidad y contenido de dióxido de carbono y por tanto por ahora no hay posibilidad de que venga el gas de Venezuela”, dijo en esa oportunidad.
Ahora en Houston, en el marco del CERA Week, que es una conferencia anual sobre energía organizada por la firma S&P Global, volvió a insistir que se debe descartar toda negociación en ese sentido con Venezuela
“Colombia puede prescindir del gas natural venezolano debido a que sus propios desarrollos marítimos son prometedores”, dijo Felipe Bayón a la agencia de noticias Reuters. «Hay potencial de gas en el país, que sería suficiente para Colombia y posiblemente para exportar antes de que termine la década», agregó.
El ejecutivo también dijo que las reservas de gas para desarrollar podrían ayudar a la compañía a compensar la falta de desarrollos de esquisto si el Congreso avanza en una propuesta de prohibición del fracking y más bien sugirió que Colombia y Venezuela deben abordar la necesidad de una interconexión eléctrica.
Esto está en línea con lo expresado el ano pasado por el presidente ejecutivo de la Asociación Colombiana del Petróleo, Francisco Lloreda, quien en su discurso de la V Cumbre de Petróleo, Gas y Energía en Bogotá dijo: “Algunos insisten en importar gas de Venezuela, teniendo gas en Colombia. No creo sinceramente que nadie en Colombia piense que Maduro es más confiable que Putin; la experiencia indica que es mala paga y que no cumple”.
El problema para la administración de Petro, sin embargo, es que la exploración y explotación de las reservas de gas natural contradice toda la oferta electoral de desacelerar toda actividad en el sector de hidrocarburos y el propio nombramiento de la ministra Vélez Torres, que es tan solo una filosofa y radical activista ambiental con nulo conocimiento sobre la industria petrolera y gasífera, según comenta una fuente del sector de los hidrocarburos colombiano.
“Los contratos que existen son los que necesitamos potenciar y acompañar” dijo Vélez Torres en una reciente entrevista para la revista Semana. “La compra de gas a Venezuela no va a pasar en este momento. No deberíamos ser dependientes de ningún país en nada. Ojalá que con los hallazgos offshore (costa afuera) podamos tener una suficiencia cada vez mayor y confío en que eso pueda ser así.”, agregó la funcionaria. Incluso, la ministra niega tener información de que la empresa Prodata Energy haya recibido autorización para importar gas de Venezuela hacia Colombia.
Otro aspecto que generó choques entre Petro y Bayón -de acuerdo a la fuente- es el tema de la relación comercial entre Ecopetrol Citgo y la petición hecha por el gobierno de Nicolás Maduro de suspender los contratos, aspecto que el saliente presidente de la estatal colombiana no comparte por la relación comercial, compromiso y seguridad jurídica que tiene el contrato entre las dos empresas. “La seriedad, respecto y sobre todo confianza que tenemos con Citgo, difícilmente lo consigamos con PDVSA”, habría dicho Bayón a Petro, según lo comentado por la fuente.
El único límite que podría afrontar Ecopetrol –de acuerdo al criterio de Bayón- es alguna medida que adopte la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos (OFAC) que impida un acuerdo comercial en el marco de las sanciones que se mantiene contra el sector de los hidrocarburos venezolano y PDVSA.
“Tenemos una relación comercial con Citgo como las tenemos con muchísimas otras compañías y en este caso es fundamental que observamos las sanciones de la OFAC y nos vamos a regir por esas sanciones. Si ese régimen cambia tendríamos que analizar esa situación porque somos consecuentes con ese marco legal y así nos vamos a seguir comportando”, dijo funcionario.
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