Desesperados. Así están los arrendatarios y trabajadores de los principales mercados municipales de Valencia, quienes en horas del mediodía de este lunes 5 de abril protestaron a las afueras del Mercado Periférico La Candelaria para exigir que les permitan trabajar: una tercera semana consecutiva sin actividad representa para ellos la quiebra.
Por: Kevin Artega González / El Carabobeño
“Ya no tenemos qué comer. Van a ser tres semanas de pérdidas que nos han afectado a todos, incluso a nuestras familias”, dijo Agni Guerrero, arrendatario del Periférico La Candelaria, en entrevista con El Carabobeño. “Nosotros expendemos alimentos y somos priorizados, no entendemos por qué el alcalde Alejandro Marvez y el gobernador Rafael Lacava toman esa actitud contra los mercados”.
De acuerdo a cifras de los arrendatarios, el año pasado al menos 111 comerciantes del Periférico La Candelaria quebraron y en lo que va de 2021, de los 300 que quedan activos unos 30 han manifestado que no podrán volver a abrir. En el Mercado Peatonal del Sur, de 800 queda la mitad. Mientras que en el Periférico La Isabelica, de más de 160 comerciantes persisten menos de 100.
El pasado 22 de marzo la Alcaldía de Valencia decretó el cierre temporal de los mercados municipales y a cielo abierto durante 14 días continuos, iniciando ese lunes y culminando el domingo 4 de abril, en el marco del estado de alerta declarado en el municipio a causa de la pandemia COVID-19.
Los trabajadores y arrendatarios estaban preparados para abrir nuevamente hoy. Sin embargo, luego de que Nicolás Maduro anunciara una tercera semana consecutiva de cuarentena radical, el decreto de cierre temporal de los mercados municipales en la capital carabobeña fue extendido por siete días adicionales, hasta el domingo 11 de abril. Esto afectada al Periférico La Candelaria, La Isabelica, Plaza de Toros, Goajiros, Mercacenter y Merca Norte.
Tras dos semanas paralizados, las pérdidas son incalculables. “El lunes, cuando decretaron el cierre de los mercados por 14 días, muchos ya habían comprado mercancía perecedera y al cabo de tres días se pudrió. Fueron cestas y cestas de verduras y frutas que se pudrieron”, aseguró Chanel Somoza, arrendataria y miembro de la Asociación Civil Expendedores del Mercado Periférico La Candelaria.
Según Somoza, los comerciantes que perdieron esos productos se encuentran prácticamente quebrados y sin la posibilidad de volver a abrir ya que, al depender exclusivamente de las ganancias diarias, ni siquiera han logrado pagarles a los proveedores por los despachos que recibieron hace dos semanas, cuando sin previo aviso la Alcaldía de Valencia decidió cerrarlos temporalmente.
La mayoría de los arrendatarios posee entre uno o dos puntos de venta por los cuales deben pagar un monto diario, incluso si no han registrado algún consumo. Esto también les genera deudas, detalló Guerrero, por lo que desde el año pasado se han visto obligados a devolver los aparatos a los bancos, en caso de ser alquilados, o pedir la desconexión, si son propios.
A su juicio, es injusta la decisión de las autoridades del municipio, porque desde 2020 los trabajadores del Periférico La Candelaria, así como los de otros mercados municipales, han hecho grandes esfuerzos para garantizar el cumplimiento de las medidas de bioseguridad. “Tenemos a personas en las entradas con termómetros, alcohol y gel antibacterial”, agregó.
Yasmil Rodríguez, representante del Mercado Peatonal del Sur, expuso que los cierres continuos de sus establecimientos solo los llevan a la quiebra. Para él y el resto de sus compañeros, un día menos de trabajo se traduce en un día más sin la posibilidad de llevar el sustento a sus hogares, tomando en cuenta que viven del día a día.
“Ya estábamos prácticamente quebrados. Estos siete días más van a terminar de quebrarnos, por eso solicitamos apoyo para que nos dejen trabajar”, sostuvo el comerciante.
En 14 días de paralización Ángel Montero, arrendatario del Mercado Periférico La Isabelica, ha reportado más de 400 dólares de pérdida, sin contar las deudas generadas por la mercancía que le despacharon los proveedores el 22 de marzo. “Esto nos ha perjudicado porque nos quedamos sin llevar sustento y descapitalizados”, sostuvo.
La solicitud de los arrendatarios de los tres mercados municipales de Valencia es clara, ante un panorama cada vez más incierto: una reunión con autoridades de la Gobernación de Carabobo y la Alcaldía de Valencia, a fin de que se establezca un horario en el que se les permita laborar, en cumplimiento de las medidas de bioseguridad.
“Solicitamos al alcalde y al gobernador una mesa de trabajo urgente. No comprendemos cuál es la verdad sobre estos cierres si somos un sector priorizado. Reúnanse con nosotros para llegar a un acuerdo”, insistió Chanel Somoza, vocera del Periférico La Candelaria. “Muchas personas necesitamos de este trabajo, no solo los arrendatarios”.
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