Tres pacientes ingresados por diagnóstico de envenenamiento por mordeduras de serpientes se debaten entre la vida y la muerte en el hospital Jesús María Casal Ramos, de Acarigua Araure, en el estado Portuguesa. No hay suero antiofídico y a cinco días de su reclusión el Ministerio para la Salud aún guarda silencio, denuncian familiares.
Se trata de Nerio Castillo , de 68 años, mordido por una mapanare en su mano derecha, el pasado 28 de julio en el sector Los Rieles cuando limpiaba el patio de su casa; Ángel Valera , de 66 años, quien también fue atacado por una mapanare en su mano izquierda, el pasado 31 de julio cuando limpiaba una siembra de café en Fila Rica,Quebrada Honda de Guache, límites con el estado Lara; e Isnal Chueyo, de 16 años, quien presenta dos mordidas de mapanare , en pie y tobillo, cuando el pasado 28 de julio limpiaba una siembra de maíz en el sector La Lucía, también en límites con el estado Lara.
La información fue confirmada este sábado 1° de agosto por el capitán de bomberos zuliano Luis Contreras, experto en mordeduras de víboras y agente voluntario de transporte de antiofídicos.
Contreras se movilizaba este viernes 31 de julio desde Maracaibo para atender la demanda del antídoto por el que claman los familiares de las víctimas. El voluntario relató que la falta de transporte y combustible ha imposibilitado la recolección de las donaciones del antiofídico.
Contreras lleva al menos 20 años recorriendo el país llevando de forma gratuita los sueros antiofídicos a los hospitales cuando el antídoto es solicitado por los médicos a través de la red de emergencia nacional.
Este sábado ha amanecido en el peaje Rafael Urdaneta del puente sobre el Lago de Maracaibo pidiendo una cola para trasladar las dosis al hospital Casal Ramos. Ha sido casi imposible por las restricciones de movilidad de la cuarentena social impuesta por el COVID-19, dijo.
La escasez de suero antiofídico en Portuguesa , como en el resto del país,es muy grave. Los afectados tiene que recorrer hasta tres estados en busca de la terapia antiofídica o esperar que el capitán Luis Contreras , adscrito al Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias ( Inea), se traslade con el antídoto desde Maracaibo hasta los hospitales dónde están recluidos los pacientes.
La falta de recursos físicos y financieros impiden esta labor humanitaria. Luis Contreras advierte que las intensas lluvias caídas en los últimos días en algunas zonas del país han causado numerosos casos de mordeduras de serpiente.» Si, las lluvias alborota a las serpientes, y estas salen de sus madrigueras en busca de refugios en lugares seco.
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