Desde la semana pasada, la campaña presidencial de Iván Duque en 2018 enfrenta otro cuestionamiento: la presunta financiación por parte del megaempresario venezolano Oswaldo Cisneros, de la cual se tuvo noticia por una revelación del diario El Tiempo, que dio a conocer un audio de Nubia Stella Martínez, directora del partido del Presidente, el Centro Democrático, en el que ella así lo afirma.
Por Juan Pablo Pérez – LA SILLA
Puntualmente, Martínez aseguró en un audio, resultado de una interceptación legal, que Cisneros “dio” 300 mil dólares a la colectividad, en plena campaña presidencial.
Eso es importante porque la ley explícitamente prohíbe que extranjeros financien campañas o partidos políticos en Colombia.
Pese a que Martínez negó los hechos, aseguró que se trató de “un lapsus” y dijo que Cisneros se acercó a donar, pero a través de una familia del país de apellidos Ricaurte Silva, La Silla Vacía encontró que, además de la donación de los Ricaurte, una empresa colombiana, filial de una extranjera en la que Cisneros tiene el 18 por ciento, donó 700 millones de pesos al Centro Democrático ese año, siendo así una de las donaciones más grandes.
Como particularidad, los aportes de los Ricaurte (320 millones) y los de la empresa relacionada con Cisneros (700 millones) dan poco más de 300 mil dólares, a dólar de 2018 en 2.800 pesos en promedio. Justo la suma que menciona Nubia Stella Martínez en el audio en cuestión.
El aporte
Esta sombra sobre los apoyos del Presidente apareció el pasado miércoles, cuando El Tiempo reveló que Nubia Stella Martínez había estado declarando el día anterior en la Fiscalía debido a unos audios en los que aparece hablando con María Claudia ‘Cayita’ Daza, investigada por el escándalo conocido como la Ñeñepolítica (según el cual un presunto narco habría gestionado junto a ella recursos para para comprar votos para la campaña presidencial en La Guajira y Cesar), sobre la financiación a Duque en 2018.
En el audio, que es el resultado de una interceptación legal hecha por la Corte Suprema en el caso de presunta manipulación de testigos contra el expresidente, senador y padrino político de Duque, Álvaro Uribe; Nubia Stella Martínez afirma que el empresario venezolano Oswaldo Cisneros dio 300 mil dólares para financiar la campaña del Presidente.
La afirmación sale de una pregunta que le hace Cayita Daza: “¿Qué pasó con lo del venezolano?”.
A lo que la directora del partido uribista responde: “Sí. ¿Sabes cuánto nos dio? 300 mil dólares”.
Cuestionada por El Tiempo al respecto, Martínez negó que la plata del empresario extranjero hubiese ingresado a la campaña y aseguró que quien donó al partido no fue Cisneros, sino sus socios en Colombia que aportaron 320 millones de pesos.
Esos socios son la familia Ricaurte Silva que, de acuerdo a lo que Martínez dijo luego en la W, habrían sido intermediarios entre Cisneros y el Centro Democrático.
La semana pasada, en La Silla Vacía revelamos quiénes son los integrantes de esa familia, su relación con Cisneros y su donación a la campaña Duque.
Los Ricaurte Silva son los esposos Miguel Ricaurte y Martha Juliana Silva, quienes, junto a sus hijos Santiago y María Juliana Ricaurte Silva, aparecen donando cada uno 80 millones de pesos al Centro Democrático el año de la elección de Duque.
Efectivamente, ellos son socios de Oswaldo Cisneros en su banca de inversión Silk -en la cual el venezolano tiene el cargo de consejero del Consejo Asesor- y son conocidos por ser conservadores de vieja data del círculo más íntimo de la excandidata presidencial goda Noemí Sanín.
En esta banca de inversión también están asociados poderosos empresarios venezolanos como Vicente Carrillo-Batalla (cofundador del banco Mi Banco y de la banca de inversión Cinergi Capital) y Eugenio Mendoza (miembro del grupo Mendoza, con varias empresas en el sector automotriz).
Lo que no mencionó Nubia Stella Martínez es que, además de los Ricaurte, una empresa de la que es accionista Cisneros también le aportó a su colectividad, un asunto que conocimos tras revisar los reportes que el mismo Centro Democrático hizo en el portal Cuentas Claras del Consejo Nacional Electoral.
La petrolera de los 700 millones de pesos
La empresa que donó al Centro Democrático es la filial en Colombia de la empresa de producción de gas natural Canacol Energy Ltd, de origen canadiense, en la que Cisneros tiene participación.
Oswaldo Cisneros Fajardo, como contamos en este hilo de Twitter, es un poderoso empresario en Venezuela miembro de la familia Cisneros, una de las más ricas del vecino país y famosa por haber creado un emporio: primero, en bebidas azucaradas y, luego, en telecomunicaciones.
Cisneros tiene vínculos con la dictadura chavista y en concreto con Nicolás Maduro, pues es socio de varios proyectos petroleros en Venezuela.
Sin embargo, en una entrevista este año la exsenadora Piedad Córdoba dio a entender que en el chavismo no gustan de Cisneros y aseguró que al autoproclamado presidente Juan Guaidó “se lo inventó” él.
El empresario también tiene negocios en el sector petrolero a través de sus compañías Petrodelta y Canacol.
Cisneros es accionista de Canacol desde el 2015 cuando su compañía Cavengas Holdings, con sede en el paraíso fiscal de Barbados, compró el 19,9 por ciento (el tope que permite la legislación canadiense) de esta productora de gas natural; convirtiéndose, así, en el accionista con la mayor participación, aunque hoy esa participación es del 18 por ciento. Es una empresa listada en la bolsa de Toronto y de Colombia
Desde entonces, él hace parte de la junta directiva de la multinacional como miembro independiente.
Canacol opera en Colombia a través de una filial cuya razón social es CNE Oil & Gas S.A.S., como consta en su certificado de existencia y representación legal.
Certificado de CNE Oil &… by La Silla Vacia on Scribd
Esta filial fue la que donó 700 millones de pesos al Centro Democrático en 2018.
Lo hizo a través de dos donaciones.
Una por 400 millones de pesos
Aunque la plata llegó al partido y no directamente a la campaña de Iván Duque, esto es importante porque, como contamos en La Silla con respecto a la campaña de reelección de Juan Manuel Santos en 2014, la financiación a través de los partidos es el canal que utilizan algunas campañas presidenciales para sacarle el cuerpo a los topes legales que tienen los candidatos, pues las colectividades no tienen tope.
Además, la ley permite que personas jurídicas, que no pueden donar a estas campañas, lo hagan.
De hecho, las donaciones al Centro Democrático ese año de elección presidencial sumaron poco más de 27 mil millones de pesos aportados por empresas y personas naturales, superando por más de 13 veces las hechas en 2016, 2017 y 2019, y eso que ese último año hubo elecciones regionales.
Le escribimos a Nubia Stella Martínez para preguntarle por la donación de la empresa de la que Cisneros es socio y si de eso hablaba cuando mencionó los 300 mil dólares en su conversación con Cayita Daza. A través de una carta, ella contestó que los aportes de CNE Oil & Gas S.A.S. y los de la Familia Ricaurte Silva son diferentes y no guardan relación entre sí y tampoco con la conversación de Martínez con Claudia Daza.
«El primer aporte de CNE Oil & Gas al Centro Democrático fue el 2 de marzo de 2018. La conversación con Claudia Daza fue el 23 de abril de ese mismo año», dice también la carta de Nubia Stella Martínez en la que la directora del CD destaca que «jurídica y organizacionalmente el partido Centro Democrático y la campaña presidencial son entes distintos, autónomos e independientes. No hubo, por supuesto, transferencias de donaciones a la Campaña a través del Partido, como consta en las cuentas ya certificada por la autoridad electoral. Asumimos algunos gastos de la forma y en las cantidades que autoriza la ley».
Nota de la editora: aunque en principio no había respondido a nuestras preguntas, publicada esta historia Nubia Stella Martínez mandó una carta, cuyos argumentos fueron incluidos en el artículo y pueden ver completos aquí.
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.