Dos productos químicos utilizados en cosméticos y cremas solares pueden favorecer el desarrollo del cáncer de mama, según han sugerido un equipo de investigadores de la Universidad de Massachusetts (Estados Unidos), en un estudio publicado en la revista Environmental Health Perspectives.
En concreto, en el trabajo se ha identificado el mecanismo por el cual los estrógenos y los xenoestrógenos, químicos ambientales que actúan como estrógenos, pueden promover la aparición del cáncer de mama.
«La nueva investigación ofrece herramientas más sensibles para detectar los posibles efectos nocivos de los productos químicos ambientales, los cuales serían ignorados por los métodos utilizados actualmente», han comentado los investigadores.
Los dos compuestos examinados en células cultivadas en el laboratorio y en las glándulas mamarias de ratones, fueron el filtro ultravioleta benzofenona-3 (BP-3), también conocido como oxibenzona, y el propilparabeno (PP), un conservante antimicrobiano que se encuentra en cosméticos y otros productos de cuidado personal.
«La benzofenona-3 es un protector solar que funciona. Si lo usa, puede prevenir el cáncer de piel, pero hemos visto que puede haber un subconjunto de personas para las que puede presentar un importante peligro como, por ejemplo, las mujeres con alto riesgo de cáncer de mama o aquellas con antecedentes de este tumor con receptor de estrógeno positivo», han recalcado los científicos.
Y es que, han evidenciado que el daño en el ADN de las células mamarias con receptores de estrógenos se produce en concentraciones que son de 1/10 a 1/30 de las requeridas para estimular la proliferación o la expresión génica. «»No es tóxico a menos que las células tengan receptores de estrógenos. Por lo tanto, está actuando a través del receptor de estrógenos para crear este daño. No hay consecuencias si lo pruebas en otras células», han zanjado.