Durante una entrevista este jueves en el ‘podcast’ de Joe Rogan Experience, Elon Musk, CEO de Tesla y cofundador de SpaceX, ratificó que el nuevo superdeportivo de su compañía automotriz incluirá un paquete SpaceX con propulsores de aire frío para aumentar el rendimiento del automóvil, recoge el portal Electrek.
«Pensé que tal vez podríamos hacerlo flotar, pero no demasiado alto, […] como a un metro sobre el suelo o algo así […] Si cae, se romperá la suspensión, pero nadie va a morir», comentó. «Estoy seguro de que podríamos hacer un propulsor con el que la matrícula se voltee hacia abajo, al estilo James Bond, y luego habría un propulsor de cohetes por detrás, y eso le daría tres toneladas de empuje», señaló Musk.
Ya en 2018 anunció el empresario que los vehículos de Tesla tendrían propulsores de cohetes, que mejorarían la aceleración y el rendimiento general del automóvil. Sin embargo, de acuerdo a The Hill, es poco probable que la empresa pueda dotar con capacidades flotantes su próximo ‘roadster’, ya que el propio Musk dijo que será este año cuando termine el proceso de ingeniería del modelo, con lo cual la compañía espera comenzar a producir esos vehículos de nueva generación en el año 2022.
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