Este sábado 21 de mayo se celebró en la parte alta de la parroquia La Vega, en Caracas, una misa en solidaridad con el padre Alfredo Infante s.j; coordinador de derechos humanos del Centro Gumilla; y Marino Alvarado, coordinador de exigibilidad del Programa Venezolano de Educación Acción en Derechos Humanos (Provea).
La eucaristía estuvo presidida por el sacerdote jesuita Manuel Zapata, director del Centro Gumilla. Esto, en apoyo por la demanda de acusación hecha por el gobernador del estado Carabobo, Rafael Lacava, hacia Infante y a Alvarado el lunes 16 de mayo. Ambos presentaron en un informe en el mes de marzo, los datos sobre las 1.414 presuntas ejecuciones extrajudiciales que se llevaron a cabo en Venezuela durante el año 2021.
La región con más casos fue el estado Carabobo. Por esta razón, Lacava acusó a ambos defensores de derechos humanos, quienes en una reciente rueda de prensa ofrecida el jueves 19 de mayo, en donde resaltaron que no se trata de algo personal hacia el Gobernador de Carabobo, sino de exigir que se inicie una investigación sobre esas muertes ocurridas en varias regiones de Venezuela.
Durante el encuentro con los medios de comunicación, tanto Infante como Alvarado, reafirmaron su inocencia ante ese presunto delito de difamación. Adicionalmente, resaltaron su disposición para dialogar con las autoridades para que se investiguen las muertes por presuntas ejecuciones extrajudiciales; así como también se respete el derecho a la vida.
También el párroco de La Vega dijo que están siendo asesorados por varios abogados penalistas. Agregó: «desde el punto de vista espiritual estamos fortalecidos. Desde el punto de vista jurídico estamos abiertos a iniciar el proceso», en caso de que no se logren acuerdes.
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